Según esta formación política, miles de animales fueron abandonados o perdieron sus hogares por la erupción del volcán Cumbre Vieja y la labor de recuperación ha corrido a cargo de entidades protectoras de la isla, que carecen de instalaciones públicas, por lo que dependen de la solidaridad para atender a los animales rescatados.

"Las protectoras necesitan urgentemente instalaciones públicas en las que poder reubicar a los animales. Ahora mismo dependen de las casas de acogida y han improvisado temporalmente un polideportivo, un colegio, una vieja granja abandonada y terrenos cedidos por personas particulares. Muchos animales, con suerte, podrán volver con sus familias; pero otros no podrán hacerlo y necesitan un lugar donde vivir en condiciones dignas", apuntó Iris Sánchez, coordinadora del Pacma en Canarias.

El Partido Animalista apuntó que ha mantenido una estrecha relación con las protectoras palmeras y ha realizado varias recogidas de material y alimentación para ayudarlas.

Tras analizar las necesidades de las asociaciones, registró ante el Cabildo de La Palma un escrito reclamando la creación de, al menos, dos centros de acogida para los animales abandonados que sean gestionados por las protectoras, uno en la zona este y otro en la oeste.

"Estas entidades están realizando una labor encomiable, sin apenas medios ni recursos. Lo justo es que el Cabildo las apoye y facilite su trabajo aportando las instalaciones que tanto necesitan", subrayó Sánchez.