Así mismo, se amplía en una hora, de 20.00 a 21.00 horas, el servicio de estacionamiento regulado (SER), permitiendo a los residentes estacionar durante ese intervalo en las plazas azules.

En total, setenta medidas y 162 millones de euros son las cifras que apuntalan el Plan de Calidad del Aire, cuyo reto principal es reducir aún más la incidencia del tráfico en el medio ambiente.

El Plan, que se presentó en diciembre de 2011, cuando la actual alcaldesa, Ana Botella, era delegada de Medio Ambiente y Movilidad, fue aprobado definitivamente este jueves por la Junta de Gobierno, tras recoger las propuestas y alegaciones presentadas durante el periodo de información pública.

El Ayuntamiento de Madrid ha revisado las 377 alegaciones presentadas por diferentes instituciones, particulares y grupos políticos, entre otros. Se han estimado total o parcialmente 91; se han desestimado 161; se consideran ya contempladas 98, y 23 no se refieren directamente al Plan.

Entre las que se ha admitido total o parcialmente destacan la incorporación de un representante de los vecinos en la ponencia técnica de la Comisión de Calidad del Aire; la extensión de las Áreas de Prioridad Residencial, y la consideración de una nueva unidad urbanística, las denominadas 'supermanzanas'.

ZONA DE BAJAS EMISIONES (ZEB)

El Plan de Calidad del Aire apuesta por un enfoque integral de la movilidad, a la que dedica el 60% de sus medidas. La razón es que las emisiones del tráfico, a pesar de haber bajado un 26% desde 2006, aún representan el 65% de las emisiones de óxidos de nitrógeno en la capital.

El Gobierno que preside Ana Botella, quien explicó los detalles del plan en rueda de prensa, confía en que estas medidas, junto a las políticas del resto de administraciones, hagan descender las emisiones de óxido de nitrógeno procedentes del tráfico un 22% respecto a 2009, mientras que el NO2 quedará por debajo del límite legal de los 40 microgramos por metro cúbico.

Para hacer todo esto posible, la Junta de Gobierno ha aprobado provisionalmente una modificación de la Ordenanza de Movilidad -que entrará en vigor el 1 de julio de 2012- para poner en marcha tres medidas del Plan de Calidad del Aire, la primera de las cuales es establecer una Zona de Emisiones Bajas (ZEB) en Madrid, es decir delimitar un ámbito territorial en la ciudad coincidente con el de mayor congestión de tráfico y de niveles de dióxido de nitrógeno (NO2) para implantar medidas específicas.

En segundo y tercer lugar, se amplía en una hora, de 20.00 a 21.00 horas, el servicio de estacionamiento regulado (SER), permitiendo a los residentes estacionar durante ese intervalo en las plazas azules, y establecer la obligación de parar el motor cuando el vehículo esté estacionado, aun cuando el conductor no abandone su puesto.

A diferencia de otras ciudades europeas, no habrá un peaje de acceso a la ZEB, pero a partir de julio de 2012 se establecerá un SER ambiental con una tarifa un 10% más elevada que en el resto de la ciudad.

Como el fomento de la movilidad ciclista dentro de la ZEB es prioritario para el Ayuntamiento, se va a poner en marcha un servicio público de alquiler de bicicletas (1.500 bicicletas y 3.000 anclajes) financiado con el incremento de la recaudación de la tarifa diferenciada del SER; se ampliará la infraestructura existente con el desarrollo de una red de ciclo-calles y ciclo-carriles, y se creará la denominada M-10 ciclista y el eje ciclista Mayor-Alcalá.

El Plan prevé el uso de tecnologías limpias en el 100% de la flota de autobuses de la EMT que presta servicio en la ZEB.Se sustituirán, para ello, 307 autobuses de biodiésel por otros de Gas Natural Comprimido (GNC) y se instalarán filtros de partículas y óxidos de nitrógeno en otros 485 autobuses (en 2012 se instalarán en 100).

Además, se crean dos líneas de subvenciones, una para cambiar el 25% de las calderas de gasóleo de más de 10 años y más de 1.000 kw. en la ZEB y otra para energías limpias en los taxis.