El PSOE ve tras los recortes “un proyecto de reasignación del papel de las mujeres”

MADRID
SERVIMEDIA

La dirección del PSOE denunció este viernes que detrás de las medidas de ajuste aprobadas por el Gobierno con la “coartada” de la crisis hay todo un proyecto de “reasignación del papel de las mujeres” para devolverlas a un rol social del pasado.

La vicesecretaria general del PSOE, Elena Valenciano, informó en rueda de prensa de la reunión mantenida con asociaciones de mujeres y profesionales de varios ámbitos preocupadas por el “duro golpe” que las medidas del Gobierno suponen para las mujeres.

Cuando se reducen los servicios públicos, se cuestiona la extensión de las escuelas infantiles, se reduce a la “mínima expresión” la ayuda a los dependientes, la carga se traslada a las familias, que es tanto como decir que se traslada a las mujeres, aseguró Valenciano.

A ello se une que la reforma laboral “dificulta” aún más el acceso de las mujeres al mercado laboral, y todo ello permite concluir que por la vía de los ajustes “y con la gran coartada de la crisis” se está cambiando el modelo de sociedad.

Para las mujeres supone un claro “retroceso”, aseguró, porque es a ellas a las que se carga el peso de las prestaciones que se recortan, son ellas las que vuelven a un rol del pasado para hacer sostenible ese modelo de sociedad.

Las asociaciones, explicó Valenciano, perciben un claro intento de “silenciarlas” mediante el recorte de ayudas, y denuncian además que la reducción de las campañas de concienciación contra la violencia de género pretenden lo mismo, “anestesiar” a la sociedad para poder “operar” sobre ella.

Elena Valenciano denunció de forma concreta el “ruido” generado por el propio Gobierno sobre el futuro de la regulación de la interrupción voluntaria de embarazo, y exigió la aclaración sobre si seguirá en la cartera básica de prestaciones.

En opinión de Valenciano, es “comprensible” una posición política, ideológica o moral contra el aborto, pero en ese caso lo lógico es “prohibirlo”. Lo que no tiene mucho sentido, en opinión del PSOE, es someter a compra y venta el derecho de las mujeres a interrumpir voluntariamente su embarazo, de forma que sólo puedan ejercerlo las que tengan dinero para ello.

A partir de los apenas 52 millones de euros que el sistema dedica a interrupciones voluntarias del embarazo, los socialistas concluyen que su limitación no perseguiría en ningún caso ajustar el déficit, sino contribuir a un proyecto “ideológico” para cambiar el rol de las mujeres.

(SERVIMEDIA)
04 Mayo 2012
CLC/caa