La movilizacion en la capital estuvo encabezado por los secretarios generales de UGT, Nicolás Redondo, y CCOO, Antonio Gutiérrez, y con la presencia destacada dl coordinador general de Izquierda Unida, Julio Anguita, que acudió en compañía de su familia.

El único incidente de la protesta lo protagonizaron un grupo de afectados por la crisis de PSV, que estaban concentrados al final de la manifestación en la Puerta del Sol con varias pancartas en las que se leía "Nicolás dá la cara. Antes de dimitir hay que construir", y "UGT, mójate", y que recibieron el rechazo de algunos manifestantes cuando intentaron "tapar" con sus gritos la intervención del líder ugetita.

En sus intervenciones, los líderes sindicales evitaron pronunciarse sobre la posibilidad de convocar una huelga general, a pesar de los insistentes gritos de los manifestantes que reclamaban una medida de este tipo.

Gutiérrez y Redondo recordaron que las reformas laborales que propone el Gobierno afectan a todos los trabajadores, incluidos los funcionarios, que dejarán de percibir 200.000 millones por la congelación salarial; a los pensionistas, que no percibirán unos 62.000 millones, y a losparados, para los que se plantea un recorte de prestaciones de 300.000 millones de pesetas.

También advirtieron que las medidas que porpone el Ejecutivo supone una transferencia de más de 5 billones de pesetas de los trabajdores a los empresarios, a los que, dijeron, que se beneficiará con unos 200.000 millones de pesetas en incentivos fiscales.

En una referencia velada al presidente del Gobierno, Antonio Gutiérrez señaló que "los políticos españoles tienen muy poca talla política, aunque se las en de grandes estadistas" y añadió que "utilizan el poder para atentar contra los más débiles. A esto se le llama cobardía".

Señaló que el Gobierno se ha unido con la derecha nacionalista, y advirtió que "cuando vengan mal dadas, esos socios serán los primeros en restregarle por la cara sus incapacidades". A su vez, le exigió el cumplimiento de promesas sociales como la de mantener el nivel de las prestaciones sociales y animó al conjuntó de la sociedad a que envíen telegramas a la Moncloa expresando u protesta, escriban a los periódicos y llamen a las radios.

Por su parte, el secretario general de UGT dijo que el contarto de aprendizaje supndrá una reducción del salario mínimo en España, sin nigúan contraprestación social, y agregó que "el PP se estará frotando las manos con este tipo de política", lo que permite "esperar tranquilamente la alternancia".

Sin referirse a la huelga general, Redondo advirtió que los sindicatos están dipuestos a realizar todo tipo de medidas para consegir que el obierno cambie su política y afirmó que "lo irresponsable no es movilizarse, sino hacer la misma política con dos que con cuatro millones de parados".