Cospedal pide dejar de defender “derechos que se pueden escribir, pero no pagar”
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La secretaria del PP y presidenta de Castilla-La Mancha, María Dolores de Cospedal, pidó hoy dejar de defender “como una bandera” aquellos “derechos que se pueden escribir pero que no se pueden pagar”.
En su intervención en la los “Desayunos Autonómicos” organizados por el diario La Razón, Cospedal se mostró sorpendida porque aquellos que son, a su juicio, “en una parte muy importante” responsables de la actual situación, sean a su vez los primeros en abanderar la “reclamación de derechos” que ni ellos mismos pagaban.
La número dos del PP afirmó que en la comunidad que preside tanto empresarios como sindicatos y otras organizaciones sectoriales han comprendido que “la cultura de la subvención por la subvención ya no es posible”, y por ello abogó por establecer unos servicios y prestaciones sociales básicas “sostenibles en el tiempo” y se puedan “ pagar entre todos”.
Esto le sirvió como eje para afirmar que el Gobierno de Mariano Rajoy ha tomado medidas que “no son populares, que a veces son antipáticas y que no figuraban en nuestro programa electoral”. Pese a ello, para Cospedal las actuaciones del presidente son “necesarias”.
La presidenta castellanomanchega defendió su gestión y aseguró que va a “cumplir el objetivo de déficit” del 1,5% porque tienen “obligación” pero también “compromiso y voluntad” de hacerlo. Reconoció que ya ha realizado algunos ajustes pero que todavía quedan más por acometer.
En este punto defendió sus polémicas medidas de reducir a la mitad el Parlamento autonómico y quitar el sueldo a los diputados, dejando así la dedicación a esta actividad a quien quiera hacerlo por vocación y de un modo altruista. No descartó que su comunidad acuda al mecanismo de rescate "si hace falta", como ya hicieron con el fondo para pagar a proveedores, y aseguró que "no pasará nada".
Castilla-La Mancha era la comunidad con el déficit más elevado del Estado, un 7,5% y por ello la que más tiene que recortar, situación que, en varios momentos, Cospedal utilizó para justificar sus medidas recurriendo así a la herencia recibida del anterior Gobierno socialista.
La dirigente del PP aseguró que el “dique de contención” lo tiene puesto en los servicios sociales básicos, principalmente en la sanidad y educación públicas, y añadió que ha hecho unos “ajustes muy importantes en todo”.
Este año el presupuesto descendió un 20%, los castellanomanchegos ya no tienen Defensor del Pueblo autonómico, tampoco un Tribunal de Defensa de la Competencia ni un Consejo Económico y Social. Además, a final del año sólo quedará una empresa pública y dos fundaciones instrumentales.
La presidenta destacó que también ha reducido a la mitad los altos cargos y los puestos de libre designación. Redujo el salario de los funcionarios públicos pero también eliminó la paga extra del Gobierno autonómico.
Cospedal se mostró satisfecha porque, a pesar de la situación de la que partía en la carrera por logar cumplir el déficit fijado, el Ministerio de Economía al analizar la situación del primer semestre ha situado a Castilla-La Mancha en el 0,7%.
El trabajo ha sido “muy ingrato, muy duro y muy poco popular” por el esfuerzo llevado a cabo, pero ella se siente respaldada porque cree que “los ciudadanos agradecen al político que toma decisiones, aunque a veces no sean las más populares”, y le da igual que le digan que se juega las próximas elecciones.
Cospedal se mostró partidaria de combinar la política de austeridad con medidas de incentivos para volver a crecer y crear empleo. Confía en la política con mayúsculas y considera que no se puede fiar todo a los tecnócratas, anque estos pueden ayudar. Se definió a ella misma y a su equipo gobierno como los “consejeros delegados” de una “gran empresa” llamada Castilla-La Mancha.
(SERVIMEDIA)
19 Sep 2012
DGU/gja