Estas organizaciones admiten sentirse "estafadas" por el Ministerio de Industria, Energía y Turismo, ya que, según el sector, verán reducida su retribución en casi 500 millones de euros mientras el resto del sistema eléctrico experimenta un incremento de ingresos superior a los 1.000 millones.

"El real decreto supone un nuevo ataque a las energías renovables, puesto que destruye todos los parámetros que permitían prever la retribución de las instalaciones", denuncian estas organizaciones.

En este sentido, insisten en que la norma, "como viene siendo habitual, no ha sido consensuada ni comunicada al sector".

Estas organizaciones denuncian que el sector de las energías renovables está sufriendo "una campaña de acoso y derribo" mediante modificaciones legislativas.

Con todo ello, entienden que los inversores en energías renovables carecen de parámetros que les permitan predecir cuál será su retribución.

Por otra parte, acusan al ministro José Manuel Soria de "difamar" a un sector que debe ser un pilar básico para la recuperación económica de España. "La confusión interesada entre régimen especial y renovables, la extrapolación de costes a diez años sin mencionar ni uno solo de los beneficios, como la creación de empleo, o el reiterado interés en culpabilizar a las renovables del déficit tarifario, constituyen formas claras de manipular a la opinión pública en contra del sector", destacan.

Por último, lamentan que se siga "dinamitando sistemáticamente al sector renovable nacional sin acometer una reforma profunda y necesaria de nuestro sistema eléctrico".