Rajoy sugiere que tendría que bajar pensiones y prestación de desempleo sin el nuevo margen de déficit
- Asegura que la caída de la prima de riesgo ahorrará "bastante más de 1.000 millones" en intereses de la deuda
- Tira de optimismo para dibujar un futuro ilusionante: "Esto empieza a funcionar. Queda mucho por atender pero llegará la cosecha"
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El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, presentó este miércoles el nuevo objetivo de déficit público como un "alivio para todos los españoles" y sugirió que sin el margen extra que le ha concedido la Comisión Europea habría tenido que tocar "las pensiones y las prestaciones de desempleo".
Rajoy lanzó esta idea durante su comparecencia en el Congreso de los Diputados, donde explicó las previsiones macroeconómicas que ha remitido a Bruselas y el nuevo plan de reformas que el Consejo de Ministros aprobó hace un par de semanas.
Subrayó como principal logro que el déficit público de 2013 sólo tendrá que bajar del 7% al 6,3,%, en lugar de al 4,5% que estaba contemplado inicialmente. Indicó que la diferencia entre una y otra cifra "es enorme" y conlleva un ahorro notable en recortes públicos y sociales.
Rajoy advirtió de que "la situación se hubiera convertido en insoportable" si este ejercicio hubiera que disminuir el déficit público en una cantidad superior al año pasado. "Con Europa en recesión no se podía pretender que redujésemos 26.000 millones", remachó. Advirtió de que, en tal caso, habría tenido que tocar partidas importantes de los Presupuestos Generales.
"Basta con que ustedes imaginen lo que habría representado reducir el déficit en esas dimensiones. Y no hablo ya de lo que hubiera representado para las administraciones autonómicas o locales. Piensen en algunas competencias del Gobierno central, como las pensiones o las prestaciones por desempleo", argumentó.
El jefe del Ejecutivo atribuyó a su gestión el margen que le ha concedido la Comisión Europea, convencido de que en las instituciones comunitarias ahora se confía en la nueva política económica de España y afirmó que el objetivo de déficit del 6,3% "es fruto de una negociación de un país que está levantando cabeza y que es fiable".
AHORRO POR LA PRIMA DE RIESGO
Además, sacó pecho por la caída que la prima de riesgo ha experimentado desde finales del año pasado, especialmente con el fuerte descenso del último mes, que ha permitido que se sitúe por debajo de los 300 puntos frente a los más de 600 que alcanzó en verano de 2012.
Rajoy argumentó que esa diferencia conlleva un gran alivio en el pago de los intereses de la deuda. De hecho, aseguró que si la prima de riesgo continúa así se ahorrarán "bastante más de 1.000 millones" hasta final de año.
"La caída de la prima de riesgo o el vuelco en la balanza de pagos, entre otros, no son fruto de ningún milagro", recalcó. "Eso es fruto de la negociación que se hizo posible porque España volvía a ser fiable".
Rajoy indicó que lo mismo pasa con el "nuevo ritmo en el ajuste del déficit". "No ha sido un milagro ni que hayamos pillado de buen humor al comisario europeo de Economía. Eso ha sido el fruto de una negociación con un país que está cambiando, que lleva bien sus cuentas, que cumple sus compromisos, que está levantando la cabeza y que es fiable".
FUTURO OPTIMISTA
El presidente del Gobierno se ratificó así en la política económica que lleva aplicando desde que tomó posesión en La Moncloa y dibujó un escenario futuro plagado de optimismo. Reconoció que el pasado reciente "ha sido muy duro pero no ha sido en vano" y pidió "perserverar" en las reformas que pretende aprobar durante los próximos meses.
Rajoy defendió su política convencido de que la economía "ni se improvisa ni puede variar a cada paso" y rechazó cualquier "cambio de rumbo" ahora que se abre "un nuevo escenario que nos permitirá comportarnos con mayor holgura".
Negó que sus previsiones supongan "cambios en los objetivos y directrices" y sostuvo que ya se están logrando "resultados objetivos" como los expuestos a lo largo de su discurso.
En este punto, rechazó las propuestas planteadas por el PSOE al entender que los 6 millones de parados que existen en España "no merecen ligerezas de ninguna clase ni políticas erráticas" de mayor gasto público como pide Rubalcaba.
Rajoy hizo un llamamiento a los partidos de la oposición a "sumarse" a las políticas del Gobierno y señaló que está "abierto a toda sugerencia útil que nos ayude a ser más fuertes".
Pronosticó que con sus políticas "vamos a empezar a mejorar" y vaticinó que "los resultados llegarán" tarde o temprano. "Esto empieza a funcionar. Queda mucho que atender pero llegará la cosecha", remachó.
Finalmente, indicó que a su Gobierno no le falta "ni confianza en el plan que estamos aplicando ni fe en la capacidad de la economía española" y subrayó que "ni estamos en el camino equivocado ni hemos perdido el tiempo ni tenemos las manos vacías".
(SERVIMEDIA)
08 Mayo 2013
PAI