En la rueda de prensa conjunta que ofrecieron tras reunirse en el Palacio de Viana, Margallo afirmó que la primera norma es la precaución. "Vamos a esperar a que las autoridades estadounidenses averigüen y expliquen lo que ha ocurrido", emplazó, antes de recordar que dirigentes de la UE han expresado ya su "enorme preocupación" porque en el "corazón" de Europa están las libertades individuales, la privacidad, la democracia y el imperio de la ley.

Más exigente se mostró su interlocutor galo, quien avanzó que "se solicitarán explicaciones" si se demuestra que el ciberespionaje se ha extendido a la UE. "Las expresiones no deben poder espiarse", remarcó Fabius, para quien las autoridades norteamericanas "deben explicarse" y si no "se harán preguntas" para forzarles a ello.