Así lo defendió el diputado de CiU Jordi Jané al explicar en rueda de prensa su abstención, como miembro de la Mesa del Congreso de los Diputados, ante la petición del PSOE para interpelar al presidente sobre ese asunto.

Explicó que, en su opinión, formular una interpelación al presidente del Gobierno "es posible, es reglamentario, es constitucional".

El Reglamento, sentenció, "no lo impide en ningún caso". Otra cosa es que el presidente no esté obligado a responder esa interpelación, y por eso CiU aboga por incluir esa obligación.

Sin embargo, expresó su recelo sobre la interpelación concreta presentada por el PSOE porque pretende con ella, según el enunciado, exigir "responsabilidad política" al presidente, y en el texto ya anuncian que la moción consecuente será de reprobación.

CiU entiende que, actualmente, el único mecanismo legalmente previsto para reprobar al presidente es la moción de censura.

"No está regulado en ningún caso que vía interpelación se haga una moción de reprobación con exigencia de responsabilidad política", explicó.

Cuestionó, no obstante, el argumento de algunos miembros del PP y aseguró que el asunto de fondo, la relación de Rajoy con Bárcenas, "sí es politica general", porque de hecho lo era cuando el presidente compareció el día 1 ante el Congreso.