Así queda reflejado en una encuesta realizada por Bodas.net a parejas que están organizando su boda, la cual pone de manifiesto que "cada vez son más las personas que apuestan por celebrar la primera noche de casados/as como les apetezca y no como, quizás, hasta ahora había sido o habíamos creído".

Los datos ponen de manifiesto que la mitad de los consultados se decanta por pasar esa noche junto a su pareja, en la más estricta intimidad, mientras que el 34% prefiere pasarla con los amigos continuando la fiesta de la celebración. Por su parte, un 16% planea simplemente descansar tras un día lleno de emociones.

Hace años, gran parte de las parejas se casaban para iniciar una vida en común, comprar una casa y tener hijos. La boda era el inicio de todo eso. Sin embargo, en la actualidad solo el 4% de las parejas reconoce casarse para ir a vivir juntos o tener hijos pronto, según el el Libro Imprescindible de las Bodas, publicado por Bodas.net en colaboración con el profesor de Esade, Carles Torrecilla, y Google.

El motivo principal que lleva a las parejas a pasar por el altar son sus ganas de dar un paso más en la historia de amor (56%), seguido de ser un motivo para celebrar con amigos y familiares (16%) o formalizar la relación por los hijos (10%), entre otros casos.

Si antes la boda suponía el inicio de la convivencia juntos, hoy en día prácticamente todas las parejas (91%) ya conviven antes del gran día. Igual sucede con los hijos, pues tres de cada diez parejas tiene descendencia antes de casarse, según el Libro Imprescindible de las Bodas.

Los motivos, las circunstancias y las ganas de dejar a un lado las tradiciones más estrictas que rondan al mundo de las bodas ha hecho que las parejas de las nuevas generaciones cambien por completo el panorama nupcial rompiendo, incluso, con la leyenda de la noche de bodas.