Según informó el Ministerio, De Benito intervino en el plenario, que abordó desafíos no tradicionales a la seguridad, como contraterrorismo, ciberseguridad, seguridad alimentaria, energética y acceso al agua, gestión y mitigación de desastres naturales o tráfico de seres humanos.

Su discurso giró en torno al acceso al agua y su importancia en las relaciones internacionales, pues es uno de los grandes desafíos a los que se enfrenta la región de Asia-Pacífico y también uno de los ejes prioritarios de la acción del Gobierno español en materia de derechos humanos.

En este sentido, De Benito subrayó la Estrategia del Agua en el Mediterráneo, iniciativa que ha lanzado junto con Argelia, o la participación en el Centro de Investigación para la Desalinización en Medio Oriente.

Se ocupó también de destacar el nivel tecnológico y la experiencia de las empresas españolas en este sector, líderes en desalinización, reutilización y tratamiento de agua. España es el cuarto país del mundo en número de presas, el segundo país en la reutilización de agua tratada y el primer país de Europa en producción de agua desalinizada.

El secretario de Estado aprovechó el viaje para mantener encuentros bilaterales con los ministros de Australia, Bangladesh, Indonesia, Laos, Myanmar, Pakistán, Singapur y Tailandia.