En la rueda de prensa de presentación de los resultados de 2013, el presidente del banco señaló que “aunque hemos avanzado”, la economía española es “vulnerable a un cambio del sentimiento inversor” y “queda mucho por hacer”.

Fainé indicó que el año pasado fue “de menos a más”, para agregar que “hemos pasado de la desconfianza a la confianza”.

Así, señaló que 2013 fue un ejercicio de “cambio de tendencia” y apuntó que en 2014 la economía española subirá un 1%, cifra que apuntó se podría “sobrepasar ligeramente”.

El responsable de CaixaBank señaló que se trata de un crecimiento “modesto”, para agregar que “aún tiene margen de recorrido al alza si continuamos haciendo los deberes”.

Fainé destacó que la competitividad tiene que “seguir mejorando” para mantener las exportaciones y subrayó que “el consumo privado asoma la cabeza”.

En todo caso, el presidente de la entidad llamó la atención sobre la importancia de reducir “significativamente” la tasa de paro en España, ya que su nivel actual no es aceptable. “El país necesita crear empleos para dejar atrás la crisis”, agregó.

Las previsiones de CaixaBank apuntan a que la Seguridad Social ganará 200.000 cotizantes, con lo que la tasa de paro podría situarse por debajo del 25% de la población activa en la segunda mitad de 2014. A partir de ahí, “esperamos que se inicie una recuperación más intensa” del mercado laboral español.

Para el presidente del banco, “el gran ajuste pendiente es el déficit de las Administraciones Públicas”, en el que hay que avanzar porque es “fundamental” para continuar reduciendo la prima de riesgo.

Respecto a la reestructuración y saneamiento del sistema financiero, Fainé subrayó que los “avances han sido muy importantee”, y defendió que ha salido del proceso “reforzado, más solvente” y en una “mejor posición de liquidez”.

Por otra parte, valoró que se haya superado la “insostenible” guerra por el pasivo de años anteriores y apuntó que la mora del sistema financiero ha seguido subiendo, para cerrar el año por encima del 13%.

Por último, respecto a las pruebas de resistencia que realizará el Banco Central Europeo (BCE) a las entidades, aseguró que “no tengo ninguna duda” de que el sistema financiero español esta en disposición de superar este reto.