Gordo informó de que IU ha presentado varias iniciativas, incluida la comparecencia de algún miembro del Consorcio Regional de Transporte, “porque a la gente que está pagando el abono transporte, que generalmente suele tener menos poder adquisitivo, se le está hurtando la posibilidad de utilizar un bien que está pagando”.

Esta situación afecta a más de 600.000 usuarios de estos autobuses, indicó Gordo tras reunirse con representantes de los trabajadores, que están realizando paros ante la decisión de la empresa de dejar de emitir la partida “toma y deja” (tiempo que emplean los conductores en repostar o llevar el vehículo al garaje), que, según su versión, supone una disminución del sueldo de entre 150 y 300 euros mensuales.

El portavoz de UGT en la empresa, Miguel Ángel Patiño, explicó que una sentencia ya reconoció hace años el derecho de los trabajadores (ahora hay 380 empleados afectados de un total de 420) a percibir su salario por estas horas en las que no están al frente del volante y denunció la intención de la empresa de vulnerar este derecho y eliminar la partida.

El diputado de IU Joaquín Sanz, también presente en la reunión, criticó la costumbre del Gobierno regional de “mirar para otro lado cuando se trata de un conflicto laboral”. “En realidad afecta a 600.000 trabajadores que utilizan estos autobuses para desplazarse y que además han pagado la mensualidad del abono transporte, por lo que debieran verse compensados de alguna manera”.

“Parece que a la Consejería y al Consorcio Regional de Transporte les diera miedo enfrentarse con unas patronales cuyas actuaciones pueden tener unas consecuencias muy graves, porque los trabajadores no tienen ni tiempo de ver si se les ha pinchado una rueda, han tenido un problema de frenos o lo que sea”, añadió.