Los beneficios del partido servirán para financiar programas de reintegración en la sociedad de niños soldado en Malí y la República Centroafricana, y un novedoso proyecto mundial de investigación sobre el racismo y la discriminación en el deporte, según informó en un comunicado la Unesco, que ha auspiciado esta iniciativa junto con la Juventus.

Los proyectos en Malí y la República Centroafricana servirán para que los niños puedan acceder a programas de alfabetización y de aprendizaje de oficios, como la albañilería o la carpintería, y participarán en actos culturales, deportivos y artísticos para hacerles ganar confianza y tener más esperanza en un futuro mejor.

Por su parte, los resultados del proyecto sobre investigación y racismo en el deporte serán publicados en un informe, que estará concluido a finales de 2015 y estará dirigido a gobiernos y a otras partes interesadas con datos e información sobre estos fenómenos, y servirá para ofrecer orientación sobre cómo se pueden erradicar estos problemas de los terrenos de juego.

La directora general de la Unesco, Irina Bokova, señaló que esta agencia de la ONU “se complace en colaborar con la Juventus en la lucha contra la discriminación y en el esfuerzo para crear sociedades más justas e inclusivas en las que los jóvenes tengan oportunidades para triunfar”.

El presidente de la Juventus, Andrea Agnelli, destacó que el equipo de ‘la Vecchia Signora’ muestra “claramente lo que significa participar en la lucha contra el racismo y en la promoción de la integración social. Es un camino largo y complicado en el que se necesita el compromiso de todos”.

El máximo responsable del Real Madrid, Florentino Pérez, auguró que el partido “será una gran fiesta solidaria” y que tanto el equipo blanco como el italiano ”simbolizan lo mejor del deporte". “Por eso, tenemos que asumir la responsabilidad de ayudar a aquellos que sufren”, añadió.