Coincidiendo con el Día Mundial del Medio Ambiente que se celebra mañana, la organización recordó en un comunicado la relación entre consumo y cambio climático y los efectos de éste sobre la población de los países en vías de desarrollo.

En este sentido, Ongawa alertó de que el cambio climático amenaza con "desbaratar" los logros alcanzados durante décadas en materia de desarrollo, afectando especialmente a las personas más vulnerables de los países del Sur, que no cuentan con los recursos necesarios para adaptarse a sus impactos negativos.

El responsable del área de Energía de la organización, Alberto Guijarro, explicó que el aumento de la temperatura, la disminución de la pluviosidad y la reducción de algunos glaciares que sirven de reservas de agua interanuales dificultarán el acceso al agua en determinadas regiones y, a su vez, los eventos meteorológicos extremos como las grandes tormentas y huracanes dañarán las infraestructuras hídricas.

De esta manera, de seguir las tendencias actuales, entre el 43% y el 50% de la población mundial vivirá en zonas con escasez de agua a finales del siglo XXI,alertó el experto.

Las actividades relacionadas con la energía son una de las causas principales del cambio climático al representar el 80% de las emisiones de CO2 a nivel mundial.

En relación a esto, Guijarro indicó que aunque la mayor parte de las emisiones se han generado en los países desarrollados, las consecuencias de los efectos del cambio climático los sufren fundamentalmente las personas más pobres de los países en desarrollo.

Por ello, Ongawa exigió al Gobierno de España y a las empresas que se comprometan con urgencia" con la lucha contra el cambio climático a través de medidas más ambiciosas de reducción de emisiones.