Lo hizo mediante una declaración institucional suscrita por todos los grupos políticos, con motivo del Día Internacional de la Niña, que se celebra el 11 de octubre. El texto fue leído por el presidente del Congreso de los Diputados, Jesús Posada.

“Este Parlamento reitera su llamamiento a la comunidad internacional para incluir como una prioridad en la agenda internacional Post Objetivos Del Milenio la erradicación de las causas que provocan que las niñas sean más vulnerables, entre ellas el matrimonio temprano, la mutilación genital femenina, el embarazo preadolescente o cualquier otra manifestación de violencia contra ellas, como la explotación, el tráfico y la trata infantil”, reza el texto.

Mediante esta declaración institucional, la Cámara Baja “solicita que se garantice el acceso, después de la educación primaria, a, al menos, tres años más de educación gratuita y de calidad que favorezca la empleabilidad futura de los niños y especialmente de las niñas en países en desarrollo”, añade la declaración.

El Congreso considera que “un año más de educación supone entre un 10 y un 20% más de ingresos que las niñas reinvierten al 90% en su familia”. “Invertir en las niñas es inteligente”, sentencia la declaración institucional.

Esta declaración nace también del compromiso adquirido el año pasado con la campaña 'Por ser niña', impulsada por la ONG Plan Internacional para erradicar el matrimonio infantil forzado y sobre el que próxisamente habrá una resolución de Naciones Unidas.

Esta no es la única iniciativa que ha tenido el Congreso para defender los derechos de las niñas. El pasado 22 de septiembre inauguró en su seno la exposición fotográfica sobre matrimonios forzados 'Too young to wed'.

Abierta hasta el pasado 6 de octubre, esta exposición tenía el objetivo de sensibilizar a la opinión pública frente al matrimonio infantil, como práctica contraria a los derechos humanos.