En declaraciones a los periodistas después de la sesión inaugural de la cumbre de la ONU contra el terrorismo, centrada en la ‘Detención del flujo de combatientes terroristas extranjeros’, que tuvo lugar hoy en la Escuela Diplomática en Madrid, Martínez explicó que la lucha contra el terrorismo internacional, contra el yihadismo y contra el fenómeno de los combatientes extranjeros es una “prioridad” del Gobierno y de la comunidad internacional.

Por esa razón, apuntó, el Ejecutivo ha querido dar todas las facilidades posibles a los expertos convocados por el Comité contra el Terrorismo de Naciones Unidas (CTED) para que analicen desde todos los puntos de vista posibles la “cadena de radicalización” de los yihadistas.

Esta cadena, describió, tiene lugar desde que un individuo decide “convertirse en fanático” hasta que llega a ser un “lobo solitario” y, por lo tanto, un “peligro para la sociedad”.

Martínez manifestó que el fenómeno de radicalización es cada vez “más rápido, más peligroso y afecta a más personas”, por lo que, a su juicio, tiene que ser abordado desde “una perspectiva global, con una estrechísima colaboración internacional y con herramientas tanto policiales como de prevención y con una decisiva implicación de la sociedad civil”.

Durante su intervención en la sesión inaugural de la cumbre, el secretario de Estado de Seguridad recordó que España apuesta parar combatir el yihadismo por “una respuesta integral de todos los poderes del Estado y una cooperación internacional sólida y bien construida”, por el hecho de que esta lucha tenga “la máxima legitimidad política y social” y por poner en marcha “una intensa labor preventiva y una contranarrativa” que complemente la acción policial.

En ese sentido, Martínez dijo que en este ámbito las víctimas del terrorismo “deben estar siempre presentes”, por lo que “tenemos que empeñarnos en dar voz a las víctimas que el fanatismo pretende etiquetar como enemigo religioso, militar u occidental”.

También cifró en 79 los condenados en las cárceles españolas por delitos de este tipo y en 170 las personas consideradas radicalizadoras, de las que 10 son mujeres.

EXPERIENCIA ESPAÑOLA

Del mismo modo, recordó la leyes aprobadas por España en la materia, entre las que se encuentran la creación del Centro de Inteligencia contra el Terrorismo y el Crimen Organizado (Citco), el Plan Estratégico Nacional de Lucha contra la Radicalización Violenta, el Pacto de Estado suscrito entre el Gobierno y el principal partido de la oposición para la lucha contra el terrorismo internacional, la modificación de la Ley de Enjuiciamiento Criminal o el crédito extraordinario de 10 millones de euros destinados a potenciar los servicios de información.

Por otra parte, Martínez dijo que es necesario mejorar la cooperación internacional y el intercambio de información para “dotarnos de unas fronteras más seguras para cumplir el mandato 2178 de impedir la circulación de terroristas”.

Por último, el secretario de Estado demandó una “cooperación internacional judicial efectiva, que permita el procesamiento de estos criminales y explore soluciones en el ámbito virtual”, al tiempo que ofreció la experiencia de España en el ámbito penitenciario para lograr la “rehabilitación y reintegración” de los retornados.