Según el nuevo protocolo propuesto por el Consistorio, el 35% de los taxis madrileños, los que aún no son ecotaxis o eurotaxis, no podría circular sin pasajeros en caso de que se alcanzaran máximos niveles de contaminación (escenario 3). Los ecotaxis son vehículos con límites de emisiones inferiores a 160 g/Km de CO2 y 80 mg/Km de Nox, y los eurotaxis son coches adaptados a personas en situación de movilidad reducida, que por sus condiciones especiales están exentos de límite de emisiones.

Según la normativa europea, a partir de 2020 solo podrán prestar servicio de taxi los vehículos ecotaxi o eurotaxi, de manera que desde el 1 de enero de 2015, en Madrid, sólo se permite la sustitución de vehículos por aquellos que cumplan estas condiciones.

En este sentido, el presidente de la FPTM, Julio Sanz, aseguró que el colectivo del taxi “lleva años haciendo un tremendo esfuerzo por renovar su flota, pero hay compañeros que a día de hoy aún no han podido asumir los costes de un nuevo vehículo. Pedimos, por tanto, que durante estos poco más de cuatro años que les queda de plazo, no sean penalizados, ya que además suponen un número muy escaso de taxis”.

Los representantes de los taxistas madrileños reivindicarán, además, la habilitación de carriles específicos de entrada para todo el transporte público, incluido el taxi, así como la adopción de medidas de promoción de este medio de transporte, como se está planteando hacer con los autobuses, el metro y la Renfe. Asimismo, exigirán que el protocolo obligue a los VTC (vehículos de alquiler con conductor) a cumplir la misma normativa que al taxi se le exige.