Yihadismo. Rivera prefiere la guerra al terrorismo y defiende el Estado de excepción en Francia

MADRID
SERVIMEDIA

El presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, justificó hoy las represalias de Francia contra el Estado Islámico porque, según dijo, odia la guerra pero todavía más el terrorismo; igualmente, dijo comprender el establecimiento del Estado de excepción en ese país porque “hay situaciones que merecen todo tipo de medidas excepcionales”.

En su intervención en el Foro ‘El Mundo’, Rivera reclamó una política exterior coordinada de la UE para que no haga la guerra cada país por su cuenta y, en general, coordinación, estrategia y “una conjura” como la de los españoles en el Pacto por las Libertades y contra el Terrorismo, en el marco de la ONU.

Frente a las voces pacifistas, objetó: “Yo odio la guerra, pero odio todavía más el terrorismo”. Y, admitiendo que el contraataque “no es la solución que más te gusta, es la menos mala”, se declaró dispuesto a apoyar la implicación de España en una guerra contra el Daesh. “Para eso estamos en la OTAN. Si es en ese marco, sí”, contestó a una pregunta en este sentido.

“Esto no va de pancartas, va de estrategia”, distinguió, llamando a “tener en cuenta quién está atacando nuestra forma de vida” y a pensar cómo detenerle. A esa respuesta habría que añadir el intento de integrar a los musulmanes que viven en Europa, pero dejó claro: “Me niego a pensar que la culpa es de los demócratas”.

El líder de Ciudadanos también dijo comprender la instauración del Estado de excepción en Francia, y se negó explícitamente a “dar lecciones” a ese país sobre cómo gestiona las medidas restrictivas. “Hay que ponerse en la piel de los franceses, en el pánico que genera”, observó. “Hay situaciones que merecen todo tipo de medidas excepcionales”.

Por otra parte, el presidente de Ciudadanos avaló la reacción que ha mostrado hasta ahora el del Gobierno, Mariano Rajoy, admitiendo que él “haría lo mismo”: explicar la situación y contar con el resto de líderes políticos, frente al “uso partidista” que cree que se hizo de los atentados del 11 de marzo de 2014.

Sobre el Pacto contra el Yihadismo, matizó que en su día lo criticó sólo por la inclusión de la prisión permanente revisable y que ahora esto no es un impedimento porque el PSOE ya logró incluir en él la apostilla de que se aplicaría a los terroristas la máxima pena del Código Penal vigente, que no necesariamente tiene que ser ésa si se reforma.

En cambio, expresó sus reservas sobre la apuesta del PSOE por la justicia universal para acabar con el Estado islámico, puesto que, aun declarándose a favor de aquélla, no ve el vínculo entre ambas realidades. Y también desvinculó la lucha contra el yihadismo de la religión del islam, porque mezclarlo “sería profundamente injusto para los musulmanes”.

También sobre los musulmanes, dijo comprender que no se alcen contra el Estado Islámico. “¿Quién soy yo para pedir a los musulmanes que tengan valentía para enfrentarse a ellos?”, preguntó, admitiendo que sería “lo ideal” pero que “si eso no pasa es porque tienen miedo”.

(SERVIMEDIA)
18 Nov 2015
KRT/gja