En la presentación, que tuvo lugar en el hotel Ilunion Valencia, Val explicó que en el proceso para obtener alguna de las tres categorías del sello (Bequal, Bequal Plus o Bequal Premium) se valoran 69 indicadores y que el proceso se divide, a su vez, en tres etapas. Primero, existe una etapa de asesoramiento por parte de la Fundación Bequal, después hay una segunda parte de inspección y, por último, se desarrolla el proceso de certificación en sí mismo.

“Se trata de que todo aquel que quiera trabajar con personas de discapacidad con criterios de responsabilidad, lo pueda hacer con nuestra ayuda”, aseguró la directora gerente de Bequal. Marta Val destacó, además, que desde que han empezado a trabajar con esta certificación no ha habido “ninguna empresa que se haya vuelto atrás”.

La presentación del Sello Bequal ha sido organizada por la Fundación Bequal, en colaboración con la Dirección General del Trabajo Autónomo, de la Economía Social y de la Responsabilidad Social de las Empresas del Ministerio de Empleo y Seguridad Social.

En el encuentro informativo participaron también la directora de la Unidad de Integración de las Personas con Discapacidad de la Universidad de Valencia, Celeste Asensi; el director de Recursos Humanos de Ford España, José Abargues, y el director de la Oficina de Centros y Servicios de Apoyo a Personas con Discapacidad de Activa Mutua 2008, Oncadis, Antonio Andújar.

En su intervención, Celeste Asensi destacó que la Universidad de Valencia fue una de las tres primeras universidades de España con contar con un servicio de atención a las personas con discapacidad en el año 1992. “Desconocíamos dónde íbamos a llegar, pero sabíamos que socialmente había que hacer algo por los estudiantes que llegaban con estas necesidades”, relató Asensi, para quien la universidad tiene que poner su “granito de arena y dar ejemplo”.

“A cualquier persona que esté en una universidad, o en cualquier entidad, sea cual sea su discapacidad, tendremos que ofrecerle las mismas oportunidades que a los demás. Y, si es así, tendrá que venir alguien desde fuera y medirnos y ver si lo que estamos haciendo es de calidad o no lo es. No nos toca decirlo a nosotros, a quien le toca es a agentes externos, como en este caso Bequal”, opinó Asensi, que valoró positivamente este tipo de certificaciones y consideró que es “una filosofía que poco a poco tendrá que ir extendiéndose”.

Por su parte, José Abargues explicó cómo la experiencia de Ford con la discapacidad comenzó en 1997, cuando empezaron a pensar en “poner una empresa” que diese trabajo a los hijos con discapacidad de los propios empleados de la compañía automovilística. Ahora cuentan con dos empresas de este tipo, hasta el punto de que tienen casi 900 empleos con discapacidad. “Estamos orgullosos de que lo que empezó como un taller que empleaba a 20 personas, hoy se ha convertido en un conglomerado”, subrayó Abargues.

Por último, Antonio Andújar, cuya empresa ya cuenta con el certificado Bequal Plus subrayó que el proceso de acreditación les ayudó tanto a “ordenar nuestro compromiso con las personas con discapacidad” como a abrir “muchas oportunidades de negocio”. Y puso como ejemplo que, al ver todos los indicadores, han surgido proyectos como la campaña ‘Lenguaje adecuado’, con la que han editado un manual de lectura fácil que evita términos como “minusválido” o “inválido”, así como otros proyectos de supresión de barreras de la comunicación o de accesibilidad web.

“Creemos no solamente en la accesibilidad física, sino también en la accesibilidad cognitiva para que todos nuestros mutualistas tengan los mismos derechos”, destacó Andújar, director de Oncadis, que se ha constituido como un “producto dentro del propio negocio”, resolviendo “históricas reivindicaciones” de los representantes de la discapacidad.