20-D. Los militantes de C’s jalean por fin a una telonera local

ALICANTE
SERVIMEDIA

La cabeza de lista de Ciudadanos por Alicante, Marta Martín, resultó hoy la sorpresa del mitin que organizó el partido en la capital de la provincia, después de que en los primeros días se hubiera comentado la falta de atractivo de la mayoría de los teloneros locales, que son precisamente los que se presentan a las elecciones generales en los lugares por donde gira el presidente del partido, el carismático Albert Rivera.

Ciudadanos escogió para el mitin vespertino un recinto pequeño, el auditorio del Colegio de Médicos de Alicante, que hace las veces de palacio municipal de congresos a falta de otro escenario de estas características. La dirección del partido comentó antes de la campaña que estaba buscando un sitio adecuado donde llevarla a esta ciudad, carente de los palacios de congresos de más de un millar de espectadores de aforo que suele preferir la formación.

Finalmente, se seleccionó este recinto, que facilitó la consecución de un lleno total con casi 600 asistentes, más otros 300 que, según Rivera, tuvieron que quedarse fuera contemplando los discursos de los oradores. También favoreció que sonara cerrada la ovación en que estalló el auditorio cuando, tras 20 minutos de espera y una salida en falso de la sintonía característica, Rivera y sus teloneros comenzaron a bajar las escaleras de la sala de butacas.

Abrió el acto la presidenta del grupo de Ciudadanos en las Cortes valencianas, Carolina Punset, quien relató el momento en que, hace dos años, Rivera la llamó para convocarla a la presentación del Movimiento Ciudadano que fue el embrión del partido. Ella se encargó de calentar al auditorio enumerando las carencias de la política española que motivaron la aparicion de dicho Movimiento.

Pero fue la telonera local, Marta Martín, quien, en abierto contraste con la apatía que generaron sus predecesores en Aragón y Andalucía, enardeció a los espectadores saltando de paráfrasis en paráfrasis para explicar qué había motivado que una catedrática de universidad como ella, con la vida resuelta, se hubiera metido en este “berenjenal”.

Comenzó con una alusión a la canción de los Burning para preguntarse qué hace una chica como ella en un lugar como éste. Luego citó el “cuándo se jodió el Perú” del Zavalita de ‘Conversación en La Catedral’, la novela de Mario Vargas Llosa, para concluir, de acuerdo con el enfoque oficial del partido que acepta el legado de Adolfo Suárez, Felipe González y José María Aznar, que “hace dos legislaturas”.

Desde estas premisas se autocaracterizó como “rebelde con causa” a diferencia de la famosa película protagonizada por James Dean, y,, finalmente, llamó a la movilización dando la vuelta al célebre anuncio de televisión protagonizado por Stevie Wonder, que recomendaba no conducir si uno había vivido, para sentenciar: “Si no votas, no te quejes”.

"¡MARTA, MARTA, MARTA!"

Con una voz potente y sus denuncias y llamamientos ‘in crescendo’, Martín se fue envalentonando ante la receptividad de sus compañeros y reconoció que a ella la gustaba hablar en público. Fue despedida con una gran ovación y, al terminar el acto, varios militantes la esperaban en la primera planta del auditorio para vitorearla: “¡Marta, Marta, Marta!”.

Tal era el entusiasmo que el mismísimo Rivera, al subir al escenario entre los consabidos cánticos de “¡presidente, presidente!”, se preguntó qué sentido tenía que él subiera al escenario tras dos oradoras tan persuasivas como Punset y Martín. Además, tal vez porque acababa de conocer, por la prensa, de la muerte del policía español en el atentado de Kabul, pronunció un discurso de trámite, sin grandes titulares ni arengas.

Nada más comenzar, pidió un “fuerte aplauso” por el fallecido, y quiso hacer extensivo el homenaje a todas las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, que le permitió además afear a Podemos su renuencia a firmar el pacto contra el yihadismo y su ilusión de creer que para luchar con el terrorismo valen las condenas y los eslóganes.

Ya no hubo más alusiones. Pese a que admitió que tras la muerte del policía no pegaba mucho hablar de política, hilvanó un discurso con los temas habituales del partido en la campaña y más referencias autonómicas de las habituales. Si cabe, añadió un matiz al final cuando echó la vista unos cuantos años adelante, cuando ya esté fuera de la política, y pueda recordar con sus compañeros que, en este 2015,”estuvimos allí, y lo hicimos”.

Fue al terminar el discurso y pedir Rivera un minuto de silencio por el policía asesinado cuando, según Ciudadanos, el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, que habló hoy por teléfono sobre el atentado con los candidatos del PSOE, Pedro Sánchez; y Podemos, Pablo Iglesias, envió un simple mensaje al líder de Ciudadanos para comunicarle la muerte del agente.

Según las mismas fuentes, Rivera contestó a Rajoy con otro mensaje en el que le agradeció el suyo, pero no dejó de comentarle que se habiá enterado del atentado por la prensa, a la vez que le pidió que le mantuviera informado de los acontecimientos. El olvido de Rajoy a Rivera contrastó con el hallazgo de una candidata local de Ciudadanos que, por fin, galvaniza a los militantes.

(SERVIMEDIA)
11 Dic 2015
KRT/gja