El Colegio de Fisioterapeutas de Madrid tramitó en 2015 más de 80 denuncias por intrusismo profesional

- Invita a la Comunidad de Madrid a seguir el ejemplo de Murcia o del País Vasco donde la publicidad se somete a un control de calidad

MADRID
SERVIMEDIA

El Colegio Profesional de Fisioterapeutas de la Comunidad de Madrid (Cpfcm) tramitó en 2015 un total de 86 denuncias contra supuestos falsos profesionales sanitarios, la mayoría de ellas, por casos en los que se ejercía la Osteopatía y la Quiropraxia por personas sin titulación sanitaria y por publicidad engañosa, según informó hoy a través de un comunicado.

En este sentido, el secretario general del Cpfcm, José Santos, explicó que tanto por ley, como para garantizar la seguridad de los pacientes, estas técnicas solo pueden ser aplicadas por un profesional que además de formación propia en estos tratamientos, tenga una titulación oficial en Fisioterapia, ya que se trata de técnicas que requieren conocimientos complementarios en anatomía, etc. Además, recordó que una persona sin titulación sanitaria no puede promocionar ni publicitar que ofrece tratamientos para paliar ningún tipo de patología porque ni por ley, ni además, por capacidad, tiene competencias para ello.

Sin embargo, Santos informó de que “la realidad es que nos encontramos con personas que aplican ese tipo de tratamientos tras haber recibido un curso de cuatro meses, incluso en muchas ocasiones, a distancia”. "Así, movidos generalmente por una publicidad engañosa y por el desconocimiento inicial de los ciudadanos, éstos se ponen en sus manos sin saber ni el riesgo que corren, ni que en el caso de sufrir algún daño como consecuencia, estos falsos profesionales ni siquiera tienen un seguro de responsabilidad civil que responda ante el paciente”, añadió.

Por este motivo, el Cpfcm, exigió a la Administración que limite y controle la actividad de estas personas que ejercen una actividad sanitaria sin contar con un centro autorizado por el Ministerio, ni una formación profesional oficial.

Además, la institución colegial invitó a la Comunidad de Madrid a seguir el ejemplo de Murcia o del País Vasco. En estas Comunidades la publicidad de los centros de fisioterapia se visa, de manera que cuenta con un control de calidad sobre los términos utilizados que garantiza que los ciudadanos no puedan ser llevados a equívoco por una publicidad engañosa.

COMISIÓN DE INTRUSISMO

Para mejorar su lucha contra el intrusismo, el Colegio Profesional de Fisioterapeutas de la Comunidad de Madrid desde su creación en el 1997, ya puso en marcha la Comisión de Intrusismo. Así, desde esta Comisión, según explicó su presidente, Guillermo Mielgo, se tramitan las casi 100 denuncias que se reciben al año. Además, según informó, desde este equipo se colabora estrechamente con las autoridades sanitarias y con los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado, y se realizan campañas para enseñar a la población quién y qué es un fisioterapeuta, ayudando a distinguirlo de los intrusos.

En este sentido, Mielgo aseguró que la persecución del intrusismo es parte del compromiso que tiene el Colegio Profesional de Fisioterapeutas de Madrid con la sociedad. “Perseguimos a los falsos profesionales para cuidar la salud de la población y evitar con el cese de sus actividades, posibles lesiones generadas por quienes realizan tratamientos sanitarios sin la titulación necesaria”, añadió.

MAYOR PROTAGONISMO DEL COLEGIO PROFESIONAL

Por otra parte, el Colegio Profesional de Fisioterapeutas de la Comunidad de Madrid solicitó a la Administración que le conceda un papel más protagonista en la regulación de la profesión, de manera que la propia institución colegial pueda contribuir en la reducción de los plazos de concesión de autorizaciones sanitarias a los centros de fisioterapia que cumplan con los requisitos que exige la legislación.

Y es que tal y como denuncia su secretario general José Santos, “esperar más de dos meses para abrir un centro, como sucede en la actualidad, es inviable para cualquier autónomo que durante ese tiempo ya se ve obligado a sufragar gastos como el alquiler, el pago de autónomos, etc.”, explicó. “Por este motivo, pedimos que en la Comunidad de Madrid, tal y como ya se hace en otras Comunidades Autónomas como Cataluña, la Administración trabaje de la mano del Colegio Profesional, para que la institución colegial realice un primer filtro en cuanto a la autorización del centro de manera que éste pueda abrirse en menos de una semana”, añadió.

(SERVIMEDIA)
30 Dic 2015
SRH/gja