Más de 100.000 personas, atrapadas por la vuelta de los combates en el norte de Siria

- Según Médicos Sin Fronteras

MADRID
SERVIMEDIA

Médicos Sin Fronteras (MSF) alertó este lunes de que la situación es “crítica” para más de 100.000 personas atrapadas en el distrito de Azaz, en la provincia de Alepo (norte de Siria), por la reanudación de los combates en las líneas del frente de Daesh, los territorios controlados por grupos kurdos y la frontera turca.

En el último año, la frontera siria con Turquía permanece cerrada para los refugiados sirios, excepto para las evacuaciones médicas de los enfermos más graves y para trabajadores humanitarios con permisos especiales.

MSF señaló que el resurgimiento de los combates de la última semana ha ocasionado que más de 35.000 personas hayan huido de los campos de desplazados que han sido tomados por Daesh (grupo yihadista autodenominado Estado Islámico) o que han visto cómo las líneas de frente se acercaban peligrosamente. En la actualidad, más de 100.000 personas se agolpan en las áreas fronterizas con Turquía, a tan solo siete kilómetros de los combates.

Además, diversas instalaciones médicas se han visto afectadas por la proximidad de la ofensiva y el personal sanitario se ha visto obligado a huir. El hospital de MSF en el norte del distrito de Azaz, con una capacidad de 52 camas, se mantiene operativo y está priorizando la atención de urgencia.

Muskilda Zancada, coordinadora de proyectos de MSF en Siria, recalcó que “de nuevo vemos decenas de miles de personas obligadas a escapar sin casi ningún lugar seguro al que recurrir, atrapados en este conflicto brutal”.

“Nuestros equipos médicos están trabajando bajo condiciones de una dificultad inimaginable y, dada la gravedad de la crisis, nos estamos centrando en las actividades médicas más apremiantes. Sólo en la última semana, hemos atendido a casi 700 pacientes de urgencia y, de estos, 24 eran heridos de guerra”, apostilló.

Además, el personal del hospital también ha asistido ocho partos desde el pasado 10 de abril, mientras que los equipos en terreno han distribuido mantas y colchones a más de 3.400 personas recientemente desplazadas.

“CONTRADICCIÓN CRUEL”

MSF reiteró su petición a los combatientes para que respeten a civiles y estructuras sanitarias, aunque, según Zancada, “tal y cómo se está conduciendo esta guerra desde que empezó, con el ataque deliberado a civiles”, a la ONG le preocupa “enormemente la protección de la población, ya que las líneas de frente siguen aproximándose”.

MSF indicó que existe “una contradicción cruel” entre la situación creada en el norte de Siria y las prioridades actuales de la UE sobre los refugiados sirios. “Es inaceptable que los esfuerzos de la UE se centren en cómo devolver a los refugiados sirios a Turquía, en vez de asegurar la protección de aquellos que se agolpan en la frontera sirio-turca”, explicó Pablo Marco, coordinador de operaciones de MSF en la región.

En este sentido, MSF demandó a la UE y a Turquía que trabajen de forma conjunta para hallar una solución humana a esta crisis que pase por la protección de la población que huye para poner a salvo sus vidas.

MSF opera en seis estructuras médicas en el norte de Siria y colabora con más de 150 centros de salud y hospitales en todo el país, muchos de ellos en zonas asediadas. El hospital de esta organización en el distrito de Azaz ha doblado su capacidad desde febrero, cuando los combates forzaron a miles de personas a desplazarse a esta zona.

(SERVIMEDIA)
18 Abr 2016
MGR/gja