Esas son las principales conclusiones de una encuesta realizada por Ipsos I&O Public para la ONG neerlandesa CAS International a partir de los resultados de las respuestas de 7.519 ciudadanos de Francia, España y Portugal, los tres países europeos donde la tauromaquia es legal y se celebran festejos con toros, novillos becerros y vacas de lidia.

"Está claro que cada vez más personas están tomando conciencia de la violencia infligida a los toros y ya no la aceptan", según Maite van Gerwen, directora de CAS International, quien añadió que la tauromaquia se enfrenta a “un declive de apoyo público, reflejado en la disminución de asistencia a las corridas y eventos taurinos en general”.

La encuesta refleja que el 58% de los ciudadanos de España, Francia y Portugal está de acuerdo en que las corridas de toros deberían prohibirse (el 60% entre franceses y portugueses, y el 54% en el caso de los españoles), mientras que un 22% se muestra neutral y 17% expresa su desacuerdo.

En España, el respaldo a esa prohibición es mayoritaria entre los votantes de Junts (78%), Esquerra Republicana (74%), Sumar (74%) y el PSOE (62%), en tanto que hay menos aceptación entre quienes votan al PP (37%) y Vox (38%).

Prohibir las corridas de toros cuenta con más apoyo entre las mujeres españolas (58%) que los hombres (50%) y los jóvenes de 25 a 34 años (69%).

El 77% de las personas sondeadas cree que las corridas de toros causan ‘demasiado sufrimiento’ a estos animales (el 85% de los votantes del PSOE, el 84% de los de Sumar, el 82% de los de Esquerra Republicana, el 76% de los de Junts, el 64% de los del PP y el 62% de los de Vox), al tiempo que solo un 11% considera que se trata de prácticas divertidas.

DINERO PÚBLICO

Tres de cada cuatro (el 74%) indican que la UE debería proteger el bienestar animal dentro de las tradiciones culturales (el 81% en Portugal, el 72% en Francia y el 69% en España).

El 67% muestra su desacuerdo en destinar dinero público para apoyar la tauromaquia (el 71% en Portugal, el 67% en Francia y el 62% en España).

Una de cada cinco personas encuestadas (un 18%) considera que las corridas de toros son una práctica que debería tener un lugar en la sociedad y un 24%, que se trata de tradiciones valiosas en sus países.

Por último, el 65% de los participantes considera que se debería prohibir a los menores de 18 años asistir a festejos taurinos, en línea con el Comité de los Derechos del Niño de la ONU, que desde 2014 ha instado en varias ocasiones a los países donde aún existe la tauromaquia a proteger a los niños de la exposición de esos espectáculos.

En España, actualmente está en curso una Iniciativa Legislativa Popular (ILP) llamada #NoEsMiCultura que busca eliminar la declaración de la tauromaquia como patrimonio cultural.

“No tiene ningún sentido que sea patrimonio cultural de España una práctica cruel y denostada que el 54% de los españoles desea prohibir. Actualmente, la tauromaquia nos viene impuesta y lo que reivindicamos es la necesidad de dar libertad a las comunidades autónomas y a la sociedad en su conjunto para decidir su futuro”, apuntó Marta Esteban, de la Comisión Promotora de la ILP.