Lo dijo en la rueda de prensa que ofreció en el Palacio de la Moncloa después de su primer encuentro con Junqueras, acordado la semana pasada entre en el presidente del Gobierno en funciones, Mariano Rajoy, y el presidente de la Generalitat de Cataluña, Carles Puigdemont.

“Hemos abierto un cauce de diálogo que espero que sea estable y podamos tener futuras reuniones con la máxima flexibilidad”, dijo, para apuntar que “en el siglo XXI el teléfono también sigue para resolver cuestiones concretas” y que se han “comprometido a escuchar y atender los asuntos” importantes.

La ‘número dos’ del Ejecutivo aseguró que ha sido una reunión “muy cordial”, “agradable” y “en un buen clima”, pero reconoció que es “muy difícil o imposible” que ella se erija “en una furibunda independentista”. “Ya nos conocemos todos, pero tenemos en común a los catalanes”, afirmó

En relación a la posibilidad de que el Consejo de Ministros de mañana pueda recurrir la Ley 24/205 de pobreza energética catalana, aseguró que escuchó “con mucho interés” la petición de Junqueras de que el Gobierno central no la recurra al Tribunal Constitucional. “No es para el Gobierno un asunto del contenido de la norma, sino de hasta dónde llega un Parlamento autonómico”, indicó.