Por el momento, sólo el secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, ha manifestado su intención de hacerlo, pero deberá recoger un mínimo de 9.462 avales para formalizar su candidatura.

Así se desprende del reglamento de primarias que aprobó este miércoles la Ejecutiva y ratificó este sábado el máximo órgano del PSOE entre congreso en una de sus reuniones más breves y tranquilas, ya que apenas duró dos horas en las que hubo sólo 8 intervenciones de dirigentes socialistas, además de la de Sánchez.

En el reglamento aprobado se dice que la persona que desee presentarse a este proceso de primarias tiene que recabar un 5% del censo establecido, que es el cerrado a 30 de enero de 2016, de 189.256 militantes.

Por el momento, sólo Sánchez ha manifestado su intención de optar a ser candidato pero, una vez que el Comité Federal abre este sábado el proceso de primarias, debe recabar estos apoyos para formalizar su candidatura y que sea proclamado, nuevamente, como candidato del PSOE.

En su intervención, anunció formalmente que daba "un paso al frente", como hizo el 2 de marzo cuando se presentó a la investidura a la presidencia del Gobierno, para volver a ser el "candidato a la Presidencia del Gobierno del Partido Socialista Obrero Español".

Sánchez, se mostró convencido de que están "en mejores condiciones de ganar las elecciones que el 20 de diciembre porque han visto en el Partido Socialista un verdadero instrumento de cambio; han visto en el Partido Socialista una organización que cumple on la palabra dada; han visto en el Partido Socialista una partido que antepone el interés general a su interés particular; que habla de soluciones y no de sillones; que habla de propuestas y no se centra en los reproches".

En junio del año pasado, Sánchez también se sometió a un proceso de primarias para ser elegido candidato a las generales del 20-D. Entonces, el secretario general del PSOE se convirtió en el candidato de su partido a la Presidencia del Gobierno después de ser el único capaz de recoger los avales necesarios. En concreto, recogió cerca del 15% de los apoyos de la militancia al recabar 27.249 firmas de los 193.989 militantes con derecho a voto, pese a bastaba con un 5%.

Entonces, Sánchez recabó el 15% del apoyo de los 193.989 militantes, lo que supuso incluso un porcentaje mejor del que cosechó cuando el pasado mes de julio obtuvo 41.338 avales frente a los 25.238 de su oponente Eduardo Madina y se convirtió en secretario general del PSOE.