Este año, 76 de los 1.647 niños inscritos son refugiados. Las actividades se realizarán en Barcelona, Lleida, Madrid, Sevilla, Toledo y Valencia, y tendrán lugar en los meses de julio y agosto.

Según la ONG, el objetivo de estos campamentos es ofrecer a los niños más vulnerables una alternativa de ocio y tiempo libre educativo, que favorezca su desarrollo de manera integral, su descanso y su diversión.

A través de diferentes actividades, se les ofrece una oportunidad de adquirir habilidades y nuevos conocimientos que fomenten su socialización e inclusión en la sociedad.

Estas colonias y campamentos son también, según la ONG, una oportunidad para las familias en situación de riesgo de pobreza o exclusión social que no pueden pagar este tipo de ocio para sus hijos.

Para Save the Children, el hecho de que sus padres decidan renunciar a actividades de este tipo por no poder permitírselo económicamente hace que los niños realmente se sientan discriminados por no poder disfrutar de sus vacaciones como otros niños de su edad.

La ONG da respuesta además a la malnutrición infantil y garantiza en todas sus actividades al menos una comida completa al día, ya que la llegada del verano y el cierre de los colegios supone el cese de los servicios de comedor e implica que los beneficiarios de las becas de comedor puedan tener problemas para hacer una comida completa y equilibrada diaria.

Dentro del programa social CaixaProinfancia, la fundación de esta entidad financiera colabora para que más de 1.300 niños en riesgo de pobreza o exclusión social puedan disfrutar de su tiempo libre en 26 colonias urbanas y campamentos externos de Save the Children.