El informe señala que un 28,1% de los encuestados asegura que en 2009 compra más productos con marca de distribuidor (marca blanca) que el año pasado, una cifra que aumenta entre los hombres y entre los jóvenes (con edades entre 20 y 35 años).

Asimismo, el informe indica que los productos que más frecuentemente se compran de marca blanca son las pastas, las legumbres, el arroz y los lácteos.

El estudio refleja también que los que compran en "tiendas descuento" son los que adquieren un mayor porcentaje de productos con marca de distribuidor, por encima de los que compran en hipermercados o supermercados.

Por otro lado, el 32,9% de los preguntados asegura que cuando no encuentra el producto de la marca que compra habitualmente, adquiere uno del distribuidor. Por el contrario, el 29,9% busca esa marca en otro establecimiento y un 26,9% la sustituye por otro fabricante.

Son frecuentes los consumidores que piensan que los productos de marca blanca y de fabricante son elaborados por las mismas empresas. Así lo cree el 44,3% de los encuestados, mientras que el 36,1% cree que esto sólo ocurre "algunas veces".

La mayoría de los consumidores atribuye el precio más barato de los productos de marca blanca al menor gasto en publicidad y a los menores márgenes de beneficio.

Entre aquellos que nunca han consumido un producto de marca de distribuidor, la mayoría lo justifica porque sólo adquiere fabricantes conocidos y porque son fieles a ellos. A un 1,2% no les transmiten confianza, mientras que tres de cada diez entrevistados que nunca las han consumido cree que los consumirá en el futuro.