En una carta dirigida al presidente del Consejo Europeo, Herman van Rompuy, Amnistía manifiesta su esperanza en que se progrese en áreas como la reducción de la pobreza y la eliminación de la discriminación en la región latinoamericana.

El director de la Oficina de Amnistía Internacional ante la UE, Nicolas Beger, mostró su deseo de que entre los temas a abordar durante la cumbre UE-ALC estén "los desalojos forzosos, la violencia contra las mujeres y el acceso a servicios de salud".

Amnistía puso como "ejemplo claro de violación de los derechos humanos" el de las madres de Soacha (Colombia), cuyos hijos fueron ejecutados extrajudicialmente por las fuerzas de seguridad el año pasado.

"La UE debe expresar su preocupación por las amenazas y el acoso a los que se han visto sometidas estas mujeres mientras hacen campaña en favor de la justicia y debe pedir a las autoridades colombianas que lleven a cabo una investigación exhaustiva e imparcial sobre las amenazas y los homicidios", añade.

Además, reclama que la UE abogue por un mayor cumplimiento de las decisiones de los mecanismos regionales de derechos humanos, como la Corte Interamericana de Derechos Humanos.

Amnistía Internacional confía también en que los esfuerzos de reconstrucción y ayuda humanitaria tras el terremoto de Haití del pasado mes de enero se basen en el respeto de todos los derechos humanos, que la ayuda se centre en quienes más lo necesitan y que se garantice la participación de las comunidades afectadas.