La ONCE pide a la UE que pase de las palabras a los hechos en la mejora de la accesibilidad

- En la Conferencia sobre Discapacidad y Autonomía Personal que se está celebrando en Zaragoza

ZARAGOZA
SERVIMEDIA

El secretario general del Consejo General de la ONCE, Rafael de Lorenzo, pidió este jueves a la Unión Europea (UE) que pase de las palabras a los hechos y ponga en práctica políticas que favorezcan la accesibilidad a todos los niveles, porque, enfatizó, "los derechos son algo sólo si se aplican".

De Lorenzo moderó una sesión plenaria sobre accesibilidad en la nueva estrategia europea, celebrada en el marco de la Conferencia de Discapacidad y Autonomía Personal que se está desarrollando en Zaragoza.

En su intervención, el representante de la ONCE señaló que si bien en los últimos 15 años "se ha avanzado mucho, seguimos estando muy lejos" de que la accesibilidad sea un elemento verdaderamente presente e influyente en la consecución de derechos como el de la educación o el empleo para las personas con discapacidad.

Y es que, subrayó, la accesibilidad no sólo es una política social, sino que se ha convertido en un eje central para conseguir el disfrute efectivo de derechos fundamentales como el de la educación o el del trabajo, por lo que ha de concebirse desde una perspectiva amplia.

Junto a De Lorenzo participaron en la mesa de trabajo Inmaculada Placencia-Porrero, jefa adjunta de la Unidad para la Integración de las Personas con Discapacidad de la Comisión Europea; Carlota Besozzi, directora del Foro Europeo de las Personas con Discapacidad (EDF); Cristina Rodríguez-Porrero, directora del Centro Estatal para la Autonomía y Ayudas Técnicas (Ceapat), y Edit Rauh, secretaria de Estado de Igualdad de Oportunidades de Hungría.

AYUDAR A LA INDUSTRIA

Plasencia-Porrero abogó por la necesidad de que haya estándares de accesibilidad en todo el mundo y por que las organizaciones de estandarización impulsen una guía que ayude a la industria a crear en origen productos y servicios accesibles, que, según aseguró, no son más caros y benefician en cambio a toda la población.

Por su parte, Besozzi destacó que la accesibilidad y el diseño universal benefician, además de a los ciudadanos con discapacidad, a otros colectivos como el de las personas mayores, por lo que urgió a las administraciones a que no lleguen "demasiado tarde", como ocurre "a menudo", en la implementación de estos derechos.

A su juicio, es "crucial" mejorar la formación de arquitectos y diseñadores en accesibilidad y lograr una colaboración más estrecha entre el colectivo de las personas con discapacidad y las organizaciones de consumidores.

La representante del Ceapat, dependiente del Instituto de Mayores y Servicios Sociales (Imserso), hizo un repaso por los logros de España en las políticas de discapacidad y enunció como "metas" a alcanzar la concepción de la accesibilidad como un elemento transversal y común en todas las políticas, el cumplimiento de todos los mandatos sobre accesibilidad, seguir innovando y no dejar de trabajar nunca con Europa.

Finalmente, la política húngara destacó la importancia de saber ver que la accesibilidad mejora la calidad de vida de otros colectivos diferentes al de los discapacitados, como pueden ser el de las personas mayores o el de los padres con bebés, y abogó por que no se tienda a reparar lo creado, sino a diseñarlo en origen de forma que sea usable para todos los ciudadanos.

(SERVIMEDIA)
20 Mayo 2010
IGA/caa