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Madrid. Izquierdo asegura que la anciana de la residencia de Arganda también habría muerto con “dos, tres o cuatro enfermeros”

MADRID
SERVIMEDIA

El consejero de Políticas Sociales y Familia de la Comunidad de Madrid, Carlos Izquierdo, volvió a atribuir hoy la muerte de la anciana de 93 años de una residencia de Arganda en el mes de mayo, que sufrió graves daños en una pierna al caer de la cama, a un “accidente”, y añadió que el desenlace habría sido el mismo con “dos, tres o cuatro enfermeros”, ante una oposición que denunció “falta de personal”.

El personal de la residencia de mayores de Arganda del Rey se encontró la madrugada del 9 de mayo a una residente de 93 años caída de la cama y con una pierna semiamputada al quedar atascada en la barandilla. “Acudió el enfermero de forma urgente”, informó el consejero en la comisión del ramo de la Asamblea de Madrid, donde compareció a petición de Cs para explicar lo sucedido.

La anciana fue trasladada por el Summa al hospital y allí falleció unos días después; una muerte que, según la Comunidad de Madrid, no guarda relación con el episodio vivido en la residencia y, en ningún caso, según Izquierdo, con la falta de personal del centro.

Para el consejero, la actuación fue “correcta y ejemplar”. Sin embargo, la oposición en su totalidad manifestó que existe falta de personal y que en esta residencia había un solo enfermero y 10 auxiliares para atender a 343 ancianos, ya que “las plantillas no han crecido al ritmo necesario”, en palabras de la portavoz de la formación naranja en la comisión, Marta Marbán de Frutos.

El portavoz de Podemos en la comisión de Políticas Sociales y Familia, Raúl Camargo, dijo a Izquierdo que las residencias “no pueden ser aparcaderos”, al tiempo que censuró las palabras del consejero al decir que los internos pasan la mayor parte del tiempo “dormidos” y que las residencias no son hospitales.

CIUDADANOS NO QUIERE SUJECIONES

La portavoz de Ciudadanos en la comisión pidió acabar con los medios de sujeción en las residencias de mayores, porque son “medios de restricción” con “riesgos de siniestralidad”, ya que a su juicio los internos tienden a saltar las barandillas y se pueden hacer daño. “No queremos sujeciones”, indicó.

Y es que “estas situaciones son más habituales de lo que pueda parecer en un principio”, señaló Marbán, que precisó que la “falta de personal” no se puede contrarrestar con “sujeciones” o barreras entre los residentes.

(SERVIMEDIA)
03 Ago 2017
GIC/caa