El 65% de las orcas en cautividad tienen los dientes seriamente dañados

- Por morder superficies de acero y de hormigón, según un estudio con animales en España y Estados Unidos

MADRID
SERVIMEDIA

Más del 65% de las orcas que viven en cautividad tienen un desgaste moderado o extremo en los dientes de sus mandíbulas inferiores sobre todo por morder superficies de acero y de hormigón, lo que plantea serias preocupaciones por la salud y el bienestar general de estos cetáceos.

Así se recoge en un estudio realizado por cinco investigadores de Estados Unidos y de Nueva Zelanda, y publicado en la revista ‘Archives of Oral Biology’. Se trata del primer análisis en profundidad del estado de la dentadura de la orca (‘Orcinus orca’) cuando vive en cautividad. Estos animales tienen alrededor de 48 dientes grandes.

El estudio analiza 29 orcas propiedad de una empresa en España y en Estados Unidos, y señala que todas ellas tenían dientes dañados.

John Jett, de la Universidad Stetson en Florida (Estados Unidos), antiguo entrenador de orcas y principal autor de la investigación, señala que todas las orcas analizadas tenían algún tipo de daño en la dentadura y añade: “Encontramos que más del 65% poseía un desgaste moderado a extremo de los dientes en sus mandíbulas inferiores, principalmente como resultado de morder superficies de hormigón y depósitos de acero”.

Además, los investigadores descubrieron que más del 61% de las orcas estudiadas ‘fueron al dentista’ para que les hicieran pulpotomías, esto es, se perfora un agujero en el diente para extraer el tejido pulposo que se encuentra en su interior.

Carolina Loch, investigadora de la Facultad de Odontología de la Universidad de Otago (Nueva Zelanda) y experta en la dentición de ballenas y delfines, señala que, a diferencia de nosotros, el agujero en los dientes de las orcas no está lleno ni cubierto, por lo que se necesita una limpieza diaria con productos químicos para mantener los dientes vacíos de alimentos y bacterias para evitar infecciones.

"Una vez que el diente se desgasta hasta el punto donde la pulpa está expuesta, se abre un canal para enfermedades e infecciones, por lo que el personal debe perforar los dientes", dice Loch.

Jeff Ventre, otro de los autores del estudio, también ex entrenador de orcas y ahora médico, dice que había perforado dientes de orca en su trabajo anterior. "El daño de los dientes es la consecuencia más trágica del cautiverio, ya que no sólo causa morbilidad y mortalidad en las orcas cautivas, sino que a menudo conduce a la terapia antibiótica crónica, que compromete el sistema inmune como vimos recientemente con la orca conocida como 'Kasatka'".

Loch agrega que se ha documentado que más del 60% del segundo y tercer diente de las mandíbulas inferiores estaban rotos y ese alto número "probablemente esté relacionado con las perforaciones".

SALUD Y BIENESTAR

Jordan Waltz, coautor del estudio, señala que "el daño a los dientes de estos animales es tan grave que la mayoría de los individuos pueden ser identificados por las fracturas específicas y el desgaste de dientes, como los patólogos forenses para la identificación de los seres humanos post-mortem".

Ventre recalca que las irrigaciones diarias obligatorias de los dientes hacen que las orcas tengan dificultades para su liberación total en su hábitat natural.

Ingrid Visser, una científica neozelandesa que ha estudiado orca en la naturaleza durante más de tres décadas, ha defendido durante mucho tiempo el fin de las orcas cautivas. "Sabemos que confinarlas en tanques es malo para los animales y esta investigación ahora nos da algunos números duros para ilustrar cómo su salud y bienestar están comprometidos. Dado lo grande que es la raíz del diente de una orca y que la orca tiene un sistema nervioso similar al nuestro, estas lesiones deben ser extremadamente dolorosas", apunta.

Loch indica que "los dentistas han dicho durante mucho tiempo que la salud oral es una medida de salud general, ya que nuestras bocas son la puerta de entrada a nuestro cuerpo", y cree que esto puede trasladarse a las orcas.

"Hemos documentado que el daño del diente comienza a una edad muy temprana en cautiverio y que todas las orcas estudiadas tienen problemas en los dientes. Los dientes son increíblemente importantes para la salud general de un animal y los resultados de nuestro estudio deben plantear serias preocupaciones para la salud y el bienestar de la orca cautiva", concluye Jett.

(SERVIMEDIA)
15 Oct 2017
MGR/bpp