De acuerdo con esa encuesta, sólo un 1 por ciento de losespañoles consiguieron ahorrar mucho dinero y un 6 por ciento bastante dinero, frente a un 40 por ciento que ahorró poco y un 47 por ciento que no consiguió nada. Las perspectivas para este año no son mucho mejores, ya que sólo un 6 por ciento cree que ahorrará más, mientras un 37 por ciento asegura que ahorrará menos.

Las dificultades para ahorrar tienen que ver con la situación económica del país en general y con la familiar, en particular. Así, un 56 por ciento de los encuestados opina que la situaión económica de España es mala o muy mala y sólo un 7 por ciento cree que es buena. En cuanto a las previsiones para este año, el 37 por ciento piensa que empeorará y un 19 por ciento que mejorará.

Por lo que se refiere a su situación económica familiar, el 29 por ciento de los entrevistados considera que ha empeorado con respecto al año pasado y sólo el 8 por ciento que ha mejorado. Las previsiones para este año son que empeore su economía familiar para un 22 por ciento, y que mejore para un 17 por iento.

A pesar de todo, parece que las cosas personalmente no le han ido tan mal a los españoles en 1992. Así, al 44 por ciento de los encuestados la vida le han ido muy bien o bien el año pasado, frente a un 20 por ciento a los que le fue mal o muy mal.

Sin embargo, las expectativas para este año no son muy halagüeñas, ya que el 26 por ciento de los españoles está convencido de que las cosas le irán peor este año que en 1992, mientras un 23 por ciento considera que le irán mejor.

SUBIR LOS IMPESTOS

En materia de impuestos, los españoles tampoco son optimistas. Un 62 por ciento de los encuestados se mostró convencido de que este año subirán más que en 1992, frente a un 22 por ciento que opina que se mantendrán y sólo un 2 por ciento, convencido de que la presión fiscal descenderá este año.

Sobre la satisfacción de los españoles con su trabajo o profesión, la mayoría dice estar más bien satisfecho (un 66 por ciento), pero, sin embargo, el 57 por ciento se queja de su salario. Además, mu pocos esperan que su salario mejore este año, tan sólo un 16 por ciento, frente a un 20 por ciento que dice que empeorará.

En el ámbito personal, su seguridad en el empleo es uno de los aspectos que más preocupa a los españoles, a un 71 por ciento, junto con su situación económica (77 por ciento), el futuro de sus hijos (84 por ciento), la inseguridad ciudadana (78), el problema de las drogas (86) y la difusión de la enfermedad del Sida (al 85 por ciento de la población).

PREOCUPACION POR EL PARO La encuesta analiza también las inquietudes de los españoles fuera del ámbito familiar, siendo el paro una de las más importantes. Así, el 89 por ciento de los encuestados está mucho o bastante preocupado por el desempleo.

El aumento de los precios, el funcionamiento de la sanidad, la situación económica general, la inseguridad ciudadana, el problema de la droga, el terrorismo, el deterioro del medio ambiente y la corrupción política son otros aspectos que más preocupan a la sociedad española.

La fuerte sensibillidad de los ciudadanos por el paro hace que la mayoría, el 80 por ciento, considere que la lucha contra el desempleo debe ser el principal objetivo de nuestro país en los próximos años, seguido, aunque a gran distancia, por la lucha contra la droga, el terrorismo y la corrupción.

Además, los españoles no confían en que la evolución del desempleo mejore este año. El 39 por ciento de los consultadps opina que el paro aumentará bastante y el 38 por ciento que crecerá algo, mientrass sóo un 2 por ciento cree que disminuirá algo.

Las perspectivas son más favorables a más largo plazo. Así, en los próximos cinco años son más los españoles que creen que el paro mejorará (34 por ciento) que los que opinan que empeorará (27 pro ciento).

Lo mismo ocurre con el funcionamiento de la sanidad, la situación económica general, la inseguridad ciudadana, el terrorismo y el problema de la droga, pero no con la evolución del medio ambiente, donde son más los españoles que creen que empeorará (3 por ciento) que los que piensan que mejorará (29 por ciento).

Su opinión sobre las expectativas en materia de empleo para los jóvenes dentro de cinco año, sin embargo, no son optimistas. El 41 por ciento de los españoles cree que los jóvenes tendrán menos oportunidades de encontrar trabajo dentro de cinco años y un 23 por ciento opina lo contrario. También estiman que empeorarán las oportunidades de los jóvenes para conseguir una vivienda.