En una comparecencia en la sede del Consejo Superior de Deportes (CSD) con los periodistas deportivos, Lissavetzky indicó que "podemos esperar un poco para que cuadren todas las cosas", en relación con la posibilidad de presentar otra candidatura de Madrid para organizar los Juegos Olímpicos y Paralímpicos.

En este sentido, señaló que "tenemos que aprender de 2016", donde, a su juicio, Madrid presentó "el mejor proyecto" frente a Río de Janeiro (Brasil), Tokio (Japón) y Chicago (Estados Unidos).

Lissavetzky señaló que los miembros del Comité Olímpico Internacional optaron entonces por designar los Juegos "allí donde no se había hecho, que era Sudamérica".

"¿Va a pasar eso con África? Vamos a esperar un poco, tenemos tiempo de sobra. No me preocupa tanto una candidatura europea como Roma o Berlín, pero si se nota que hay una tendencia entre la libertad de voto de cada miembro del COI hacia los Juegos Olímpicos en África, valorémoslo, porque en lugar del 20 podría ser el 24", explicó.

No en vano, Lissavetzky recordó que Sidney (Australia) organizó los Juegos Olímpicos y Paralímpicos de 2000 después de haber presentado su candidatura en tres ocasiones y vencer en la última de ellas por un sólo voto de margen.

"COSAS POR HACER"

Por otro lado, Lissavetzky reiteró que continuará "trabajando a tope" como secretario de Estado para el Deporte hasta que así lo decida el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, "no por aferrarme en el cargo, sino por lógica institucional, para que no haya ningún vacío".

A este respecto, mencionó que presenciará el próximo 28 de agosto la final de la Supercopa de Europa de fútbol en Mónaco, entre el Inter de Milán y el Atlético de Madrid, y acudirá a Turquía y a la República Checa para apoyar a las selecciones masculina y femenina en los mundiales de baloncesto, respectivamente.

Además, indicó que España pedirá organizar el Mundial de Balonmano y la Ryder Cup, y mencionó la candidatura española para acoger el mundial de fútbol, que se decidirá el próximo 2 de diciembre en Zúrich (Suiza).

Lissavetzky apuntó varias "cosas por hacer" como secretario de Estado para el Deporte, como la aprobación de las reformas legislativas del deporte profesional y del dopaje.

Respecto a Madrid, apostó por "fomentar el deporte de base" y crear "un nuevo modelo de práctica deportiva en edad escolar", para lo cual recalcó que tiene "algunas ideas en la cabeza".