Según informó CEOE este miércoles, los representantes de empresas españolas de automoción señalaron la necesidad que tienen los fabricantes japoneses por exportar su producción, cercana a los 15 millones de vehículos, con un mercado local que en la actualidad absorbe menos de la mitad de esa producción. De hecho, existen ya marcas japonesas importantes que fabrican más coches en China que en Japón.

La estrategia española es aportar valor añadido a las compañías de automóviles, tanto en América Latina como en el Sudeste asiático, donde España puede configurarse como un socio proveedor de piezas y componentes de primera dimensión junto a proveedores japoneses.

Para ello, se considera imprescindible llevar a cabo alianzas tecnológicas y que los grupos empresariales japoneses puedan desarrollar una estrategia empresarial global desde España cara a los mercados latinoamericanos (donde España es el primer inversor europeo).

En otros sectores tecnológicos, como plantas desalinizadoras o proyectos de reducción de emisiones de CO2, empresas de ambos países pueden operar de forma conjunta en terceros países con el apoyo financiero de bancos españoles, quienes valorarían de forma realmente positiva la implicación de empresas japonesas en este tipo de proyectos.

Por otro lado, el presidente de CEOE se reunió también con el presidente de Mitsubishi Heavy Industries LTD, Kazuo Tsukuda, y los responsables de las distintas áreas de actividad que desarrolla la empresa, tales como aeronáutica, maquinaria, y energía.

Díaz Ferrán tuvo ocasión de conocer el interés de la empresa por potenciar su presencia en América Latina y Marruecos, en colaboración con empresas españolas. Además, se acordó continuar los contactos entre CEOE y la MHI para la identificación de socios tecnológicos españoles en los nuevos proyectos.