Tras las revelaciones contenidas en el informe de Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil del pasado 5 de junio, la unidad de acción entre ambos pareció resquebrajarse. El propio Ábalos no descartaba un posible acuerdo con la Fiscalía tras afirmar, en una entrevista a la Cadena Ser, que había sido utilizado por Koldo y por su sucesor en la secretaría de organización socialista, Santos Cerdán.

Tras los titubeos de los últimos días, en esa reunión se pudo haber reconstruido el acuerdo entorno a una estrategia común que pasaría por que ambos de acogieran a su derecho a no declarar.

Ábalos y Koldo están citado este lunes a declarar en el Tribunal Supremo tras el informe que implica en la realización de presuntas adjudicaciones irregulares de obra pública a cambio del cobro de mordidas.

Es la segunda vez que comparecen ante el instructor del ‘caso Koldo’ que nación de la investigación del cobro de supuestas comisiones en contratos de mascarillas durante la pandemia. Sin embargo, las pesquisas apuntan ahora al posible amaño de contratos de obra pública y al presunto cobro de comisiones en el que también estaría implicado el que fuera número tres del PSOE Santos Cerdán, que está citado como investigado el 30 de junio.

El abogado de Ábalos planea pedir el aplazamiento de su declaración hasta que la UCO se devuelva un disco duro incautado en su vivienda durante el registro del pasado 10 de junio, alegando que su contenido es decisivo para su defensa. Se trata del dispositivo que la mujer que le acompañaba intentó sacar oculto entre su ropa. Previamente, el letrado habría tanteado a la Fiscalía para saber si había posibilidad de llegar a un acuerdo.

Tras una semana de tensión entre las defensas del exministro y de Koldo García, parece que sus estrategias vuelven a estar alineadas. También el exasesor lleva semanas pidiendo que le devuelvan los dispositivos incautados por la Guardia Civil para usarlos como herramienta de defensa.