Según trasladó el banco a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), “gracias al buen desempeño logrado en 2023, la entidad superó sus objetivos estratégicos en rentabilidad recurrente, nivel de capitalización, volumen de negocio y calidad del riesgo”.

El margen de intereses aumentó en todos los trimestres, un 6,6% en el cuarto, y totalizó 1.231,8 millones, lo que representa un crecimiento del 61,1% respecto a 2022, ante el efecto positivo de las subidas de los tipos de interés. Los ingresos por prestación de servicios ascendieron a 294,1 millones, un 3,4% más, por la buena evolución de los seguros y los medios de pago.

Este incremento de los ingresos recurrentes se complementó con un control de los gastos de explotación, lo que permitió multiplicar por 2,4 el margen de explotación recurrente (margen básico menos gastos de explotación) y elevar la eficiencia en 14,9 puntos porcentuales en el año, hasta situarse en el 52,4% al cierre de 2023.

La rentabilidad sobre recursos propios (ROTE) se situó en el 16% y la ratio de capital total fue del 16,9%, lo que supone un exceso de capital de 1.499 millones sobre requisitos regulatorios. Además, el banco contribuyó con más de 400 millones de euros a las arcas públicas a través de diferentes impuestos.

Los saldos dudosos se mantuvieron relativamente estables, con una tasa de morosidad del 2,4%, por debajo de la media del sistema, y una cobertura de activos dudosos del 73,9%.

El banco que preside Juan Carlos Escotet adquirió el año pasado EuroBic, el octavo banco de Portugal, situándose como séptimo banco en este país y en España. También en 2023 finalizó la operación de compra de Targobank, incrementando la presencia del banco en regiones como Andalucía, Levante y Baleares, con especial foco en el negocio ‘retail’. “La exitosa política de integraciones seguida por la entidad en los últimos años ha sido diferencial en el sector y ha llevado a la entidad a aumentar su capacidad de generación de beneficios recurrentes”, destacaron desde la entidad. En 2023 sumó más de 130.000 nuevos clientes, el 62% de ellos en zonas geográficas de expansión, y en Portugal crecieron las altas de clientes un 84%.

Por otra parte, el nuevo crédito a familias y empresas se incrementó un 14% en España y un 15,3% en Portugal, sumando casi 9.700 millones de financiación concedida. Con este flujo de crédito, 10.000 familias pudieron acceder a su vivienda en propiedad y 23.000 pymes y autónomos pudieron desarrollar su negocio. La cartera de crédito se incrementó un 0,4%, hasta 45.190 millones.

En total, los recursos de clientes se incrementaron un 10,2%, hasta cifrarse en 67.526 millones. La estructura de recursos de clientes presentó un 79% en saldos a la vista y a plazo, y un 21% en recursos fuera de balance. Los saldos a plazo y productos fuera de balance crecieron en el año en 6.520 millones de euros. Los depósitos minoristas aumentaron un 9,5%, lo que se tradujo en incrementos de cuota de mercado de 17 puntos básicos en España y de 15 en Portugal. En fuera de balance, el volumen gestionado alcanzó los 13.957 millones, tras crecer un 12,9%.