Durante la rueda de prensa previa a la Junta de Accionistas, Alemany reconoció "que no estamos interesados en que se condene a nadie", sino que quede clara la opinión de Bruselas sobre esta situación.

"De hecho queremos seguir en Italia", prosiguió Alemany, quien puntualizó que el objetivo de la compañía es sentar un precedente "que permita a las empresas moverse con seguridad jurídica por Europa".

Alemany insistió en que la UE debe dar una resolución y un pronunciamiento "y no archivar el caso", de lo contrario "exigiremos que se vuelva a reabrir".

Por su parte, el presidente de Abertis, Isidro Fainé, dijo, con respecto a la fallida fusión con la concesionaria italiana, que el pacto que alcanzaron es abandonar "en el primer semestre" de 2008 Schemaventotto (S28), sociedad de referencia.

"Para nosotros Italia es un país importante, queremos estar y de hecho estamos y queremos tener buenas relaciones", apuntó Fainé, quien finalizó diciendo que "no renunciamos a tener una presencia en Italia", a pesar de las trabas políticas.