Alberdi declaró a Radio Nacional que con la nueva ley lo que se pretende es "mejorar y actualizar la ley actual que tenemos, y adaptarlauna realidad social en la que hay claramente una posición favorable a que en ningún caso una mujer que aborte pueda tener una pena de cárcel, una pena de privación de libertad".

Para la ministra, otro dato importante introducido por esta ley es que "se considera la decisión de la mujer". "Una vez que la mujer está suficientemente informada y asesorada sobre las posibilidades que tiene, así como los apoyos económicos con los que cuenta, decide libremente interrumpir el embarazo, si sus circunstancias sí se lo aconsejan".

A juicio de Cristina Alberdi, estos son los dos aspectos de la ley que suponen un avance sobre la normativa vigente en estos momentos: la libre decisión de la mujer reconocida por ley y la eliminación de penas de cárcel para la mujer que interrumpa su embarazo.

En cuanto a la oposición de algunos partidos políticos a la aprobación del cuarto supuesto, Alberdi manifestó que "la ley pasará, ya que en el debate parlamentario seremos capaces de transmitir que es una ley positivaque avanza sobre la situación actual".

Según dijo la ministra, el mayor número de abortos se practica en las clínicas concertadas, "lo que denominamos clínicas privadas, pero que son concertadas, y la tendencia de las mujeres es a ir a este tipo de clínicas".