Este incremento del absentismo que indican los datos de la EPA, junto con la caída en las horas trabajadas, subraya esta tendencia. Las principales causas que explican este desajuste se encuentran en el aumento de las ausencias por enfermedad y las vacaciones.

Las bajas por enfermedad han crecido un 42,3% desde 2019, siendo uno de los factores más destacados que alimenta este incremento del absentismo. La incapacidad temporal también afecta principalmente a sectores con una alta carga física y emocional.

Por otro lado, el incremento de vacaciones y permisos también ha jugado un papel importante en el aumento de las ausencias, alcanzando un 36,8% más de tiempo no trabajado.

La flexibilidad en los horarios y la modalidad de trabajo remoto en muchas empresas han generado un aumento en la toma de días libres, especialmente en sectores con un alto volumen de turnos o actividades de contacto con el público. El impacto del absentismo laboral es considerable, especialmente en un contexto donde la productividad por trabajador ha disminuido.

En comparación con el resto de Europa, las horas trabajadas por ocupado en España han caído 2 puntos más que la media comunitaria. Esta brecha en productividad afecta directamente a la competitividad de las empresas y de la economía española.

Para abordar este fenómeno, el Ministerio de Trabajo va a aprobar en 2026 el nuevo registro horario digital. Dicho de otro modo, el uso de software de control horario digitales será imprescindible para cumplir con los fichajes digitales, trazables y accesibles para Inspección de Trabajo que exige el Gobierno.

Por ejemplo, soluciones populares de control horario como Kronjop destacan por ofrecer una suite para gestión de RRHH que garantiza el cumplimiento legal y reduce al mínimo el gasto de tiempo y recursos en tareas repetitivas como el control de la jornada laboral de los empleados. Además, mejorar las condiciones laborales, ofrecer programas de bienestar para los empleados y fomentar una cultura organizacional saludable pueden contribuir significativamente a la reducción de las ausencias.

Con la nueva normativa sobre registro horario digital en camino para 2026, las empresas españolas tendrán herramientas más robustas para gestionar y controlar el absentismo laboral. La obligación de registrar las pausas y descansos de manera digital permitirá a las compañías contar con datos precisos para identificar patrones de ausencias y abordar los problemas de manera más eficiente. Las empresas que logren adaptarse a este nuevo entorno regulatorio y optimizar sus procesos de gestión de personal estarán mejor posicionadas para enfrentar este desafío y mejorar su competitividad a nivel global.