Según informó la organización humanitaria, quienes intentan huir a zonas vecinas como Tawila se enfrentan a peligrosos viajes, ya que se ha detenido y atacado a civiles mientras intentaban escapar y a lo largo de las rutas hacia lugares seguros.

Muchas personas desplazadas que llegan a Tawila están deshidratadas, desnutridas, heridas y traumatizadas. La probabilidad de que se produzcan actos de violencia sexual contra mujeres y niñas sigue siendo extremadamente alta, alertó la entidad.

El director nacional de Acción contra el Hambre en Sudán, Samy Guessabi, declaró que "la magnitud del desplazamiento, los riesgos de protección y las necesidades humanitarias en El Fasher y las zonas vecinas es enorme". Asimismo, exigió que "todas las partes en el conflicto deben respetar sus obligaciones de proteger a la población civil".

CLÍNICAS MÓVILES

La organización está ultimando los preparativos para desplegar dos clínicas móviles de salud y nutrición en Tawila. Los equipos también se preparan para poner en marcha actividades destinadas a abordar los graves riesgos de violencia de género.

Entre estas medidas se incluyen la prevención, la derivación de casos y la participación y sensibilización de la comunidad a través de redes de protección comunitarias. La entidad subrayó la urgencia de estas intervenciones ante el deterioro de la situación humanitaria.

Guessabi consideró "imperativo garantizar la protección y el paso seguro de los civiles, aumentar la financiación y mantener el acceso" a las zonas afectadas por el conflicto.

LLAMAMIENTO INTERNACIONAL

Acción contra el Hambre realizó un llamamiento urgente a la comunidad internacional para que intensifique sus esfuerzos diplomáticos. La organización exigió garantizar la protección de los civiles que permanecen en El Fasher y el paso seguro de quienes huyen.

Del mismo modo, reclamó asegurar el acceso humanitario sostenido a El Fasher y sus alrededores. La entidad también solicitó a los donantes que aumenten la financiación flexible para ampliar las operaciones humanitarias críticas. Finalmente, la organización pidió apoyo para los trabajadores locales que desarrollan su labor en condiciones extremadamente peligrosas en la región sudanesa.