Así lo dijo en respuesta a los medios de comunicación, después de que en la junta general de accionistas apuntase en su discurso que habían vendido 300 coches a una empresa de alquiler en Mallorca para recibir ‘feedback’. “Esperamos que antes de final de año iniciemos las ventas a clientes privados de manera estable”, había añadido después.

Entrecanales señaló que la empresa que testeará los nuevos coches será OK Movility y apuntó que Acciona todavía no tiene orden de pedidos del vehículo, que estará dirigido principalmente a particulares, pero también a flotas.

En cambio, sí explicó que el servicio de batería tendrá un coste de 20 euros al mes (15 euros por la batería y cinco más por la recarga) y que la autonomía real del vehículo es de 130 kilómetros (150 kilómetros teóricos).

Asimismo, indicó que los coches se venderán en concesionarios y que están “discutiendo” con grandes marcas para que distribuyan también los vehículos. En concreto, además de Volkswagen y Seat, indicó que “hay más opciones”. “Creemos que tenemos un producto urbano muy bueno”, dijo Entrecanales.

Durante la rueda de prensa, también profundizó en los motivos que han llevado a la compañía a descartar un cambio de domicilio social al extranjero, tal y como ha hecho Ferrovial. Durante la junta, había asegurado que lo habían “estudiado”. Entrecanales explicó que Acciona tiene una situación “estable” en España, que los costes “no compensan el esfuerzo” y que la participación de Acciona en el mercado de Estados Unidos no es tan grande como en Ferrovial, por lo que buscar la cotización en ese país “no tiene tanto sentido”.

Asimismo, tras quejarse en la junta de los más de 130 cambios normativos producidos en España en los últimos dos años, reclamó “estabilidad regulatoria”, ya que Acciona realiza inversiones sobre “elementos impredecibles” como el viento o el precio de la energía que se tratan de calcular con “mecanismos estadísticos”, pero la previsión de cambios regulatorios es “una lotería”.

“La volatilidad regulatoria es un factor no positivo para el atractivo de la inversión en cualquier sector, pero especialmente el energético, donde las inversiones son a muy largo plazo”, señaló.

FUTURO

Respecto a posibles operaciones con activos, el presidente ejecutivo de Acciona subrayó que están considerando adquirir algunos de los que han puesto en el mercado competidores como Sacyr “no porque no consideramos que son buenos, sino porque supondría un solape a nuestras propias capacidades”. También descartó que vayan a vender activos o a reducir participaciones en sus inversiones.

Acerca de un posible impacto de la burbuja fotovoltaica en el negocio de la compañía, señaló que los proyectos previstos para este año están “ajenos a ese riesgo” por razones geográficas, de contratación o por hibridación, pero reconoció que a futuro “puede tener algún efecto”. No obstante, resaltó que han sido “conservadores” en su cartera y, por tanto, tienen “cierto margen” para adelantar o atrasar proyectos “a la espera de lo que pueda ocurrir. Señaló que el problema de la burbuja fotovoltaica “se prevé que puede ocurrir en España”, como ya ha tenido lugar en otros países.