Según detalló Acciona este miércoles, la remodelación busca mejorar la fiabilidad de la planta y garantizar así que las necesidades de agua potable de la creciente población queden satisfechas.

La compañía se ocupará del diseño, la construcción y la puesta en marcha de la infraestructura. Una vez finalizados los trabajos, la planta será transferida al cliente, Thames Water, empresa privada responsable del suministro a la mayor parte de la capital británica.

Situada en el valle del Lea, Coppermills trata y suministra agua limpia al Gran Londres, que incluye a un total de 32 municipios del entorno de la capital, y la City, su centro histórico.

La actual planta, de 60 años de antigüedad, requiere una modernización. Acciona, con el apoyo de Jacobs como diseñador principal, construirá una nueva estación de bombeo y pondrá en marcha un nuevo sistema de filtrado y tratamiento para garantizar la buena calidad del agua y mejorar los sistemas de suministro eléctrico de la instalación.