La huelga, a la que se ha sumado el Consejo General de Agentes y Comisionistas de Aduanas y el Colegio Oficial de Madrid, supondrá la cancelación de las operaciones en los despachos aduaneros.

En el caso de España, la supresión de las barreras fiscales ocasionará la pérdida de unos 6.000 empleos, ya que España realiza el 70 por ciento de su tráfico aduanero con la C y sólo el 30 por ciento restante con terceros países.

El sector de aduanas emplea en España a cerca de 17.000 trabajadores, de los que 1.235 son agentes de aduanas, 7.000 funcionarios y casi 9.000 empleados.

El paro ha sido convocado por la Confederación Internacional de Agentes de Aduanas (CONFIAD) y significará el cese de la actividad en casi toda Europa (España, Francia, Italia, Portugal, Grecia, Alemania, Bélgica y Reino Unido).

Según la CEIM, el objetivo de esta huelga es concienciar alas autoridades comunitarias de los "gravísimos problemas que tendrán que afrontar a partir del 1 de enero de 1993". Cifran en 85.000 los trabajadores de toda Europa que perderán su empleo a partir de esa fecha como consecuencia de la desaparición de las barreras fiscales.

Los agentes de aduanas de la CE exigen seguir colaborando con la administración tributaria, para lo que piden un programa de apoyo profesional que permita consolidar la mayor parte de las actividades que realiza actualmente este colctivo.

Por su parte, el Ministerio de Economía y Hacienda ha asegurado hoy que garantizará el próximo lunes la tramitación de todos los despachos que se presenten en los puestos aduaneros españoles.