Sin embargo, "la lucha continúa", declaró Simon Crowther, asesor legal de Amnistía Internacional. Según explicó, los abogados estadounidenses tienen ahora una segunda oportunidad para dar garantías diplomáticas que el tribunal considerará en mayo.

"En lugar de permitir que este prolongado proceso legal continúe, Estados Unidos debería retirar todos los cargos contra Assange", reclamó.

AI lamentó que Reino Unido insista en su intento de extradición pese al riesgo de que Assange pueda sufrir tortura o maltrato en Estados Unidos. "Las garantías ofrecidas por EEUU no han servido de nada en casos similares", agregó.

Por ello, lamentó que el tribunal británico desestimara los argumentos de Assange, en especial el que se refería a los motivos "políticos detrás de la solicitud de extradición". En la misma línea, exigió a Washington "poner' fin a la persecución política contra Assange", que además envía un mensaje "muy peligroso" a los periodistas en todo el mundo.

Estos perciben "una amenaza ambigua" sobre que "no es seguro para ellos recibir y publicar información clasificada, aunque sea en pos del interés general, concluyó AI.