Así lo señaló José Manuel Albares en la sesión de control al Gobierno en el Senado, en respuesta a la senadora del Partido Popular Isabel Moreno Mohamed, que consideró que la agenda de Exteriores de España se marca desde Rabat.

Moreno calificó de “grave” que al titular de Exteriores “le da igual lo que ocurra en Ceuta y en Melilla”, y en estas “fronteras donde el Gobierno ha olvidado y ha renunciado al principio más elemental de reciprocidad”.

La senadora del PP aseveró que el Ejecutivo ha asumido “una posición de sumisión vergonzosa” ante Marruecos “en perjuicio de los españoles, pero muy especialmente de ceutíes, melillenses y canarios”.

Por ello, instó a Albares a explicar si “este chantaje constante de Rabat sobre el Gobierno de España, sobre el presidente Sánchez, tiene algo que ver con el caso de espionaje de Pegasus”.

“CRUCE TRASPARENTE”

El responsable de la diplomacia española dedicó sus primeras palabras a expresar su pésame por la muerte de siete trabajadores humanitarios en Gaza, pertenecientes a la ONG World Central Kitchen, que lidera el chef español José Andrés.

El ministro acusó a la formación que lidera Alberto Núñez Feijóo de “obsesión anti marroquí”, y criticó que “sea precisamente una senadora por Melilla la que le pide al ministro de Asuntos Exteriores de España que tense la relación con Marruecos”.

Asimismo, aseveró que el compromiso “que tiene España y Marruecos con conseguir un cruce de personas y de mercancías transparente y regular tiene ya beneficios para Melilla y para Ceuta”.

Por ello, aseguró que en el PP no tienen una política para desplegar con Marruecos “ni con ningún otro país”, y acusó al principal partido de la oposición de querer “volver al choque de Perejil, el mismo choque y el mismo tipo de política exterior que nos llevó una guerra ilegal en Irak”.