Así lo indicó durante una rueda de prensa conjunta con su homóloga de Estonia, Eva-Maria Liimets, en la que criticó la “irracionalidad” de la guerra emprendida por el presidente de Rusia, Vladimir Putin, que “ha decidido lanzar una guerra total sin hacer diferenciación entre objetivos militares y civiles hacia un Estado soberano, pacífico, y que no representaba ninguna amenaza para la seguridad rusa”.

Albares constató que “la ciberseguridad es parte de esta guerra”, por lo que ambos ministros la abordaron “con bastante profundidad” y acordaron trabajar juntos. “Hay una guerra militar, pero también hay una guerra de desinformación y una guerra de ciberataques y ciberseguridad”, aseguró el ministro español.

En este sentido, quiso mandar un mensaje “muy claro” a los españoles: “España está preparada para repeler cualquier ataque en materia de ciberseguridad” y destacó que “llevamos muchos años trabajando en ellos y no nos pilla por sorpresa”.

Albares aseguró que Europa se enfrenta al momento "más grave de su historia reciente” y lamentó que “asistimos conmocionados a un guerra ilegal de una sola persona contra el pueblo de Ucrania”.

En este contexto mandó un mensaje de tranquilidad ya que, según aseguró, las fronteras de la OTAN "están protegidas” y España “participa activamente de ese esfuerzo”. “España ha reforzado la frontera báltica con un aumento de nuestro contingente”, recordó. “Si algo tengo claro es que esta unidad sin fisuras de todos los socios europeos y de la OTAN es la mayor baza frente a la guerra de Putin”.

ARMAMENTO QUÍMICO Y MERCADO ENERGÉTICO

Preguntado por el posible uso de armamento químico en el futuro por parte de las fuerzas rusas, el ministro de Exteriores respondió que “no hay que inquietar a los ciudadanos españoles y europeos” en un escenario que ya de por sí es “suficientemente inquietante y complejo”, aunque incidió en que “todo es posible en la irracionalidad que está demostrando Putin y los dirigentes rusos”.

Albares remarcó que en estos momentos “no hay constancia de que se estén usando armas químicas”, pero afirmó que prestarán “mucha atención” a todos los informes que puedan surgir por parte de los Servicios de Inteligencia de los países occidentales.

El titular de Exteriores señaló que la guerra de Putin está “reconfigurando” la relación de fuerzas y el orden europeo, y añadió que “estamos entrando en una nueva era cuyas consecuencias muchas ellas ni siquiera las vislumbramos todavía”. Evidentemente, explicó, en el terreno energético “probablemente es donde más claro se ve”.

En este punto, comentó que todos los países están intentando “repensar” el mercado energético en Europa y las relaciones energéticas con Rusia “con el único objetivo de que Putin no pueda financiar su guerra con nuestro dinero y que no sean las familias españolas y europeas o las empresas que dependen del gas para poder funcionar las que tengan que pagar la factura”.

Por último, “asistimos estos días con bastante esperanza a que el acuerdo nuclear con Irán pueda concluirse”. En este sentido, destacó que “hay negociaciones incesantes y todos esperamos que podamos llegar a un acuerdo para poder dar una respuesta adecuada y, sobre todo, satisfactoria para los españoles a esta crisis energética en la que nos ha introducido la guerra de Putin”.

UCRANIA EN UE Y OTAN

Preguntado por la posibilidad de que Ucrania entre a formar parte de la Unión Europea o de la OTAN en un futuro próximo, Albares quiso dejar claro que “ningún tercer Estado va a decidir” quién es de la UE o de la OTAN, sino que “corresponde a sus miembros”.

Sobre este asunto, Albares informó de que “no se prevé ningún carril rápido” para que acceda Ucrania a la Unión Europea, pero sí dejó claro que “hay un futuro común para Ucrania dentro de la UE”, aunque que sea o no de la UE dependerá de los condicionantes que pone la UE para todos los miembros.

En cuanto a la posible incorporación a la OTAN, el ministro de Exteriores español afirmó que Ucrania es un país soberano, por lo que tendrán que ser ellos los que deciden si acceden o no, juntos a los demás países que ya forman la Alianza.