El ex presidente del PP en Valencia, Vicente Sanz, dimitió la semana pasada después de que se difundiera una conversación en la qu reconocía que estaba en política para "forrarse". En relación a esta polémica, Lerma la comparó con el 'caso Naseiro', en el que el presidente regional del PP, Eduardo Zaplana, admitió que le gustaría haber cobrado comisiones.

Barberá manifestó que ha de ser el comité de conflictos el que debe resolver esta cuestión. "Me voy a remitir a ese momento en que el partido toma la decisión de convocar el comité de conflictos, donde se va a producir la investigación y el esclarecimiento de los hechos, y nadamás", apuntó.

La alcaldesa de Valencia dismintió que exista una disensión en el interior del PP regional entre un sector que le apoya y otro que se decantaría por Zaplana, y reiteró "la gran amistad que me una con Eduardo" desde hace mucho tiempo.

Tras la dimisión de Sanz como presidente del partido en Valencia, el PP no le ha exigido por el momento que abandone su escaño de diputado (no está obligado a dejarlo si no quiere), decisión que algunos medios de comunicación atribuyen a que Sanz guardaen su poder informes que podrían comprometer a algún importante dirigente popular, entre ellos Rita Barberá.

La alcaldesa ha negado esta cuestión y calificó de "absurda" la existencia de ese tipo de informes. Añadió que solamente podrá responder a este tipo de acusaciones "desde el absurdo" o "en los juzgados". Respecto al escaño de Sanz, señaló que este puesto es "personal" y la decisión de abandonarlo deberá tomarla él.

Por su parte, el sustituto de Vicente Sanz al frente de la persidencia provncial del PP, Manuel Tarancón, aseguró hoy que ocupará este cargo hasta que se reuna el partido y decida quién lo ocupará. Manuel Tarancón no quiso adelantar si él ocupará definitivamente el cargo y reiteró que la decisión la tomará el Partido Popular.