En una entrevista para la COPE recogida por Servimedia, el alcalde argumentó que es "un tanto injusto que además de castigar la imagen de La Vuelta como se ha castigado en el ámbito internacional" por los disturbios, encima tuviera que sufrir un perjuicio económico".

Defendió que hay que "pagar y mantener ese patrocinio" y avanzó que si "por cualquier circunstancia administrativa esto no pudiera ser" se articularían "soluciones que permitirán solventar desde luego ese problema".

Zanjó que su intención es que La Vuelta "no sufra ningún perjuicio económico como consecuencia de lo que sucedió". Relató además que si la etapa no terminó no fue porque "la organización de La Vuelta no hiciera todos los esfuerzos necesarios para que se pudiera celebrar".

Además del apartado económico, el alcalde volvió a insistir como viene haciendo desde que se produjeran los hechos del domingo, en que el delegado del Gobierno en Madrid, Francisco Martín, "transmitió por acción o por omisión" que "el equilibrio que debe haber entre una manifestación pacífica y la protección del orden público se debía decantar para proteger esa manifestación".

Reiteró además que la Policía tenía "las manos atadas para actuar". Añadió que si los sindicatos de Policía han mostrado su enfado con lo sucedido y hay 22 policías heridos "parece razonable pensar que el delegado del gobierno no es que no hiciera su trabajo, sino que no quiso hacer su trabajo".