Así lo afirmó en declaraciones a los medios de comunicación en la Ciudad de la Raqueta de Montecarmelo, donde remarcó que “este tipo de comportamientos, racistas y violentos, no tienen que tener ningún tipo de cabida”.

Almeida consideró las detenciones como una “noticia positiva” porque “la violencia y el racismo no tiene que tener cabida en el deporte ni en el fútbol”. Por ello, consideró que “cualquier comportamiento que atente contra esos valores que son comunes a toda la sociedad tienen que ser objeto de repudio completo, especialmente desde las instituciones”.

En este sentido, continuó el candidato popular, “debe ser perseguible en el caso de que se haya incurrido en algún tipo de consecuencia jurídica y consecuencia penal”.

Almeida incidió en que desde las instituciones hay que mandar un mensaje “claro y terminante” y remarcó que “nadie dice que Valencia sea una ciudad racista o que Mestalla sea un estadio racista”, pero matizó que “tampoco se pueden poner disculpas en relación con la conducta de Vinicius”.

Por tanto, insistió en la “condena clara” desde las instituciones “la depuración de todas las responsabilidades que sean necesarias” y la “aplicación del protocolo antirracismo de manera inmediata cuando se detecten este tipo de situaciones”.

Almeida subrayó que en esa línea será en la que se conseguirá acabar con “comportamientos xenófobos” que, “no son del conjunto de la sociedad”, pero “sí son de un conjunto de indeseables con los que tenemos que acabar lo antes posible”.